NEUQUÉN (AN).- La Justicia neuquina inició una investigación de oficio para determinar si desde la policía provincial se incurrió en los delitos de desobediencia de una orden judicial o mal desempeño de las funciones públicas, por no cumplir la orden de desalojo que hace diez días se libró la fiscalía de feria local por la toma de una cancha de fútbol en el sector de la Laguna del barrio San Lorenzo. El pedido fue impulsado por el fiscal de cámara Rómulo Patti ante la presentación de informes contradictorios sobre los motivos por los cuales la fuerza pública no desalojó el predio.
La causa, la primera en la que se solicita investigar a la policía por una toma capitalina, se inició el jueves tras que, según indicó el asesor legal del municipio José Gerez, "un informe de la Servicio de Investigación Fiscal reveló que contrariamente a las indicaciones dadas por el comisario Andrade a cargo del desalojo, sobre la presencia de mujeres y menores de edad, sólo se observó en el lugar un grupo de cerca de diez muchachos de entre 18 y 25 años".
El discrepante informe llevó a Patti y al fiscal de instrucción de feria Horacio Maitini a visitar la toma el pasado miércoles 22 en donde los fiscales constataron por acta que sólo había "diez personas mayores de edad y tres menores de edad, y cerca de cuarenta casillas precarias". En el acta realizada por los fiscales se señaló que "también advertimos la presencia de dos vehículos compactos estacionados en dicho predio. Se visualizó un colectivo viejo a modo de casilla. A 50 metros observamos la presencia de una camioneta de la policía provincial. No se observó la presencia de efectivos fuera ni dentro del predio. Junto a las casillas hay materiales para la construcción como ladrillos y ladrillones".
"La investigación se inicia sobre el comisario Andrade que estuvo a cargo del operativo, pero también se comunicó al ministerio", indicó Gerez a la vez que recordó que "hoy está en vigencia la orden de desalojo y la prohibición de ingresar materiales para la consolidación de la toma".
El predio ocupado por unas 60 familias se emplaza en Rodhe y República de Italia, a 500 metros del Círculo Policial desalojado dos días antes de que este sector fuera tomado. "Lo que se investiga es la discrecionalidad de la policía en cumplir la orden de desalojo que se emitió el 14 de julio porque esta toma no difiere a la de Senillosa donde sí se desalojó y por eso pone en duda cuál es el criterio de actuación de la policía, porque en este caso se incumple una orden porque hay mujeres y niños que en realidad no están", destacó Gerez.
