En medio de las críticas de algunos sectores, el intendente de la localidad de Senillosa, Raúl Béttiga, respondió que “me da asco tener que negociar con gente que comete delitos”, refiriéndose a los vecinos que tomaron los terrenos frente al EPET 18.
Luego de que la policía fracasó el intento de desalojo de las 24 familias, Béttiga fue duro en sus discursos; “es difícil dialogar cuando la otra parte no quiere oír”, enfatizó el intendente.
Las familias volvieron a ocupar el predio ayer por la noche y manifestaron su deseo de quedarse en ese sitio y no ubicarse en otro.
Desde el municipio y el Concejo Deliberante le acercaron una propuesta y por el momento no tuvieron respuesta. Esta le solicita a todas las familias abandonar la toma y participar de un loteo social.
Los terrenos lindantes ocupados están destinados, según el Ejecutivo, a la construcción de un espacio verde y a un plan de viviendas municipal.
Agencia Neuquén.