En el problematizado fútbol argentino actual todo es posible. Por caso, que un arquero decida discutir su nuevo contrato al valor que el dólar tendrá el año que viene, se vaya de ese club y esté a punto de arreglar con otro club que ni siquiera puede pagarle al que está por dejar ir.

Y ese que se está por ir ocuparía el lugar de su reemplazante, aunque no puede jugar hasta septiembre porque está lesionado. En limpio: Pablo Migliore se fue de Racing y llegaría a San Lorenzo, y Agustín Orión, se iría del Ciclón para atajar en la Academia.

"Lo de Tula se arregla este miércoles (ayer) y lo de Orion, mañana (hoy)", precisaron a DyN fuentes dirigenciales del club azulgrana. Sólo entonces incorporaría a Migliore, que pertenece a Boca, y se desprendería de Orión, quien pasaría a Racing.

San Lorenzo fue inhibido el martes último por incumplimiento de pago por los ex jugadores de la institución, Cristian Ledesma y Hernán Peirone, mientras que Orión y Cristian Tula intimaron al club por el mismo motivo.

Tanto Ledesma como Peirone presentaron en Agremiados todos los comprobantes necesarios para que el gremio solicitara la inhibición. En tanto, Orión y Tula, quienes todavía forman parte del plantel que dirige Diego Simeone, presentaron una intimación para cobrar lo que les deben por sueldos y primas, y San Lorenzo estaba obligado a responder en 48 horas, plazo que vence hoy.

Sobre la llegada del aún arquero de San Lorenzo a Racing, el propio presidente de la Academia, Rodolfo Molina, reconoció el interés: "Es un excelente arquero. No vamos a interferir, cuando resuelva su situación nos sentaremos a hablar", afirmó a radio La Red.

El dirigente destacó que "hasta ahora son sólo deseos, no se tocó la parte más delicada que es la de los números". Además, agregó: "No va a poder atajar en las primeras fechas, porque se recupera de una lesión. Así que vamos a buscar a otro de jerarquía para que arranque".