Sandra, la mamá del adolescente que tomó a cuatro personas como rehenes en una perfumería de Almagro y finalmente se entregó después de seis horas de negociaciones, realizó dramáticas declaraciones sobre cómo la adicción a las drogas destrozó la vida de su hijo y sus vínculos familiares y afectivos.

"Yo quiero a mi Juan, al de antes, porque ahora es un engendro, no se sabe lo que es; con la droga se convirtió en una persona indeseable, mala, que vive de mal humor", dijo la mujer a diversos medios nacionales en la jornada de ayer, cuando "Piki" fue llevado a declarar ante la Justicia.

Por consejo de su abogada defensora, el menor de edad -que tiene 16 años y 19 ingresos a comisarías por distintos delitos- se abstuvo de hacer declaraciones y tras la audiencia se dispuso su traslado al instituto de menores Roca de Capital.

"A un chico de 16 años normal no se le ocurre hacer una cosa así, el problema es que hay una venta excesiva de droga que nadie controla. Cualquier chico puede acceder a las drogas, en los barrios el paco se vende como cigarrillos", cuestionó la madre del adolescente.

Aún conmocionada por las imágenes que presenció, en las que su hijo mantuvo cautivas a cuatro personas dentro del local, la mujer afirmó: "Nunca me imaginé que él tuviese la capacidad de hacer algo así".

Sandra pidió públicamente ayuda para que su hijo pueda recibir un tratamiento de desintoxicación adecuado, afirmando que fracasaron todos los intentos de la familia por rehabilitarlo a lo largo de los últimos meses, cuando el chico poco a poco cambió su amor por el fútbol por el consumo de estupefacientes.

"Los adictos no se tienen que tomar como delincuentes" ni "como demonios", dijo la mujer, "porque en realidad se trata de chicos enfermos".

Al hablar sobre los hechos de la noche del lunes en la perfumería, la mujer se quebró: "Temí por su vida y por la pobre gente que tenía ahí", dijo.

Juan Carlos, el padre de "Piki", también hizo declaraciones y negó que el adolescente forme parte de una banda de delincuentes. Al admitir que su hijo tiene numerosas causas penales, indicó que "comete delitos por la adicción que tiene a las drogas" y dijo que desde la toma de rehenes no pudo ver más al chico.

"Detectamos todo esto de la droga hace un año y pico y nada ha funcionado", afirmó. (Agencias)