SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Peligra el innovador acuerdo laboral alcanzado entre el empresariado y el gremio hotelero-gastronómico de esta ciudad para evitar que la crisis del turismo derive en suspensiones y despidos por las dificultades para homologarlo a nivel nacional.

La conducción central de la Unión Trabajadores Hoteleros y Gastronómicos, UTHGRA, le comunicó a los dirigentes locales del gremio que no podían aceptar el acuerdo zonal tal como fue redactado porque las cámaras empresariales de otras ciudades y provincias del país pidieron que se extendiera a sus territorios pese a que no atraviesan una situación de crisis como la local.

El secretario gremial de UTHGRA Bariloche, Ovidio Zúñiga, denunció la "falta total y absoluta de solidaridad de los empresarios nacionales con los de Bariloche", al tiempo que calificó de "inexplicable" e "injustificable" que las cámaras de Capital Federal reclamen la aplicación de los mecanismos de flexibilización acordados para esta ciudad, cuando "en julio trabajaron con un promedio del 60 al 70% de ocupación", dijo.

También habrían reclamado la aplicación del procedimiento de crisis previsto en el acuerdo zonal el secretario de Trabajo de la ciudad Autónoma de Buenos Aires y sectores empresariales de salta y Jujuy cuya situación es muy distinta a la registrada en Bariloche.

En el "acuerdo zonal", el empresariado local se comprometió a no suspender ni despedir a ningún trabajador del sector durante el período de crisis fijado entre el 1 de julio y el 30 de noviembre, y a garantizar un "adelanto de sueldo" de $ 56 por cada día no trabajado hasta un valor mensual de $ 1.700 incluidos los temporarios que no se hubieran incorporado por razones de fuerza mayor. Zúñiga puso a salvo a la conducción nacional al asegurar que "(el titular de UTHGRA nacional, Luis) Barrionuevo nos pidió que busquemos una solución urgente porque quiere acompañar a Bariloche" y puso a disposición a los asesores legales del gremio para adecuar el texto. Zúñiga confió en que esta semana se podrá salvar el problema.

En paralelo el gremio comenzó a presionar a algunos establecimientos gastronómicos para que paguen el "plus de temporada".