NUEVA DELHI.- India y Estados Unidos sellaron ayer un acuerdo sobre defensa que impulsará la venta de armas estadounidenses al país asiático y fijaron el emplazamiento de dos centrales nucleares civiles norteamericanas, anunció la secretaria de Estado Hillary Clinton.
Ambos países "acordaron un pacto de vigilancia de la utilización final" de las armas norteamericanas y de la tecnología que serán vendidas a India, explicó Clinton en su cuarto día de visita al país, en una rueda de prensa conjunta con el jefe de la diplomacia india, S. M. Krishna.
"Acordamos un pacto de control del uso final (de armamento) que a partir de ahora contribuirá a que India adquiera tecnologías de defensa estadounidenses", confirmó Krishna.
Según el acuerdo, India se compromete a respetar la legislación estadounidense sobre la venta de armas.
Las leyes norteamericanas prohíben a los países que le compren material de defensa a Estados Unidos, que hagan la transferencia de tecnología a terceros países. Tampoco pueden usarla en beneficio de otros Estados.
Con esta finalidad se incluirá una cláusula en los futuros contratos comerciales entre India y las compañías de armamento estadounidenses, puntualizó un responsable norteamericano.
Los expertos estiman que dicha cláusula garantizará a Washington que las armas y la tecnología que venda a India sirvan sólo para la defensa nacional y no acaben en manos de terceros.
Esta perspectiva cae de perlas para los estadounidenses Boeing y Lockheed Martin que participan en una licitación de 12.000 millones de dólares lanzada en el 2007 por India para la compra de 126 aviones de combate. El Boeing F/A-18E/F Super Hornet y el Lockheed Martin F-16 rivalizan con el Rafale de Dassault Aviation, los MiG-35 y MiG-29 rusos, el Eurofighter Typhoon europeo de EADS, de BAE Systems y de Finmeccanica y el Gripen del sueco Saab.
En el sector nuclear civil, Clinton subrayó que dos lugares en territorio indio recibieron la aprobación para construir centrales nucleares estadounidenses.
La prensa los sitúa en los estados de Gujarat (oeste) y de Andhra Pradesh (sur). India y Estados Unidos llegaron en octubre del 2008, al final de la presidencia estadounidense de George W. Bush, a un acuerdo político de cooperación en el ámbito nuclear civil, que ha permitido reforzar el acercamiento de los últimos años entre estos dos países. Pero se está aún lejos de contratos comerciales que permitirían a la alianza General Electric-Hitachi o a Westinghouse vender y construir reactores nucleares en India.
A su vez, en su conferencia de prensa en Nueva Delhi, Clinton exhortó a aumentar los esfuerzos indio-estadounidenses en la lucha contra el cambio climático, tema a propósito del cual declaró su esperanza "de seguir trabajando, pese a las diferencias". Washington desea aproximar posiciones a India ante la cumbre de diciembre en Copenhague en la que se buscará un acuerdo que sustituya al protocolo de Kyoto, que vence en el 2012, sobre reducción de gases de efecto invernadero. Pero Nueva Delhi se niega a comprometerse en una reducción cifrada de esas emisiones.