Siete de julio de 1963. La ciudadanía neuquina se aprestaba para elegir su segundo gobierno provincial. Atrás había quedado la anulación de las elecciones celebradas el 18 de marzo de 1962, donde el recientemente fundado partido provincial se había impuesto logrando más del cincuenta por ciento de los votos. Ya eran historia los innumerables planteos militares que se habían hecho al presidente Frondizi y que finalmente desembocaron en su destitución, haciéndose cargo del gobierno nacional el senador por Río Negro Dr. José María Guido, por entonces presidente del Senado, en una maniobra urdida por el destituido presidente, quien, como diría el historiador don Luis Alberto Romero, "trató de salvar un jirón de la institucionalidad".
Atrás había quedado la vigencia del decreto 3.657, firmado por Guido que anulaba las elecciones e intervenía los gobiernos provinciales.
En Neuquén asumía el general Osiris Villegas el que, en una de sus primeras medidas de gobierno, prohibió en todo el ámbito de la provincia la actividad política del Partido Justicialista y del Movimiento Popular Neuquino y, a renglón seguido, al Partido Comunista. Villegas estuvo al frente del gobierno provincial hasta el 16 de junio de 1962, cuando entregó la Intervención al comodoro Francisco Olano, quien gobernó con más pena que gloria la última etapa de uno de los tantos gobiernos de facto que han soportado los argentinos en general y por ende los neuquinos. Con otras reglas de juego signadas por un nuevo Estatuto de Partidos Políticos, que sufrió varios cambios con la solapada intención de relegar a los peronistas -que ya habían dado muestras de su existencia en varios partidos políticos triunfantes en distintas provincias, y anteriormente con el voto en blanco-, el poder militar que se agazapaba tras la mascarada democrática del gobierno del Guido dictó el decreto nacional 7.164, el 24 de julio de 1962, por el que se implementaba el sistema de representación proporcional para futuras elecciones, medida que colisionaba de frente con la Constitución provincial sancionada en 1957.
El Estatuto, aprobado por decreto ley Nº 12.530 del 19 de noviembre de 1962, obligó a los partidos políticos a adaptarse a las nuevas reglas y en el caso del partido provincial a "refundarse", medida que comenzó a operarse el 26 de diciembre de 1962, momento en que el presidente de la Junta Promotora, don Elías Sapag conjuntamente con el secretario de la Asamblea Constituyente, don Ramón Carrizo Bagnagatti presentaron al juez electoral, Dr. Jorge Argüello Varela, un escrito acompañado por la firma de 748 ciudadanos del distrito electoral que cumplimentaban el "acuerdo de voluntades" exigido por el recién dictado reglamento electoral.
En esta presentación, primer paso para lograr un nuevo reconocimiento político, se designó como apoderado titular del Partido al Dr. Jorge Doroteo Solana y a Justo Buenaventura Vai como suplente, quienes fueron los encargados de realizar la tramitación que exigía la norma legal.
Cumplidas todas las diligencias a que obligaba la ley, el 28 de marzo de 1963, el juez electoral Dr. Jorge Argüello Varela autorizó al Movimiento Popular Neuquino para funcionar como partido político dentro de las prescripciones del decreto ley 12.530/62.
Mientras tanto los partidos políticos que en la provincia dirimirían el acceder a la titularidad del segundo gobierno democrático provincial desplegaban una intensa actividad de campaña no exenta de algunas particularidades, siendo la principal el hecho de que las dos ramas del radicalismo bregaban en todos los ámbitos para que se considerara al partido provincial como una herramienta del peronismo, situación que de comprobarse dejaría a éste fuera de carrera.
Por el otro lado, los candidatos del nuevo partido, con la anuencia y el consejo de connotados dirigentes del justicialismo a nivel nacional, no mostraban su lado peronista y esta bandera la reemplazaron por la defensa a ultranza del federalismo, lo que en definitiva y pasados los años se convirtió en su principal emblema.
Oficialmente y siguiendo los dictados del gobierno nacional las autoridades de la Intervención Federal, mediante decreto 260 del 29 de enero de 1963, habían llamado a elecciones para el 23 de junio de 1963; aunque los avatares políticos obligaban a la administración cívico-militar a cambiar las reglas según su conveniencia y por ello, en definitiva, se fijó el 7 de julio de 1963 como la jornada para celebrar los comicios en los que la Nación Argentina volvería a ser una república democrática.
En la provincia del Neuquén estaban habilitados para votar 50.727 ciudadanos de los cuales sufragaron 40.508.
Para electores de gobernador y vice se registraron los siguientes guarismos: Partido Demócrata 837 votos, Partido Demócrata Cristiano 1.132, Partido Demócrata Progresista 1.695, Movimiento Popular Neuquino 20.792, Unión Cívica Radical Intransigente 6.209, Unión Cívica Radical del Pueblo 3.581. De esta manera y aplicando la representación proporcional, el MPN logró para el Colegio Electoral Provincial 27 electores, 7 la UCRI, 4 la UCRP y 2 el PDP.
El Colegio Electoral Provincial se reunió el 26 de agosto de 1963 en lo que es hoy la antigua Legislatura y allí se consagró como gobernador y vicegobernador a los ciudadanos Felipe Sapag y Pedro Mendaña con el voto de 28 electores, por cuanto un elector de la UCRP votó por la fórmula del MPN. Por el Dr. Pedro Emilio Soria y Roberto Schapiro votaron los cinco electores de la UCRI.
No hubo votos para otra fórmula, ya que los electores de la UCRP y del PDP no asistieron al acto.
En cuanto a diputados provinciales el MPN consiguió 16 escaños (uno más que si se hubiese respetado la Constitución provincial), la UCRI 4, la UCRP 2, la Unión Popular 2 y el PDP 1.
En cuanto al Colegio Electoral Nacional los siete electores del MPN más el elector de la UCRP votaron por la fórmula de la UCRP, Dr. Arturo Illia - Dr. Carlos Perette, mientras que el elector de la UCRI los hizo por la fórmula Dr. Oscar Alende - Celestino Gelsi.
El 12 de octubre de 1963, en un día lluvioso en la capital neuquina, asumió por primera vez la titularidad del gobierno provincial el ciudadano Felipe Sapag, acción que repetiría en otras cuatro ocasiones a través de su dilatada carrera política.
HÉCTOR ENRIQUE CASTILLO (*)
Especial para "Río Negro"
(*) Miembro de número de la Junta de Estudios Históricos del Neuquén.