Sábado 18 de Julio de 2009 Edicion impresa pag. 41 > Deportes
Sufrió, hizo historia y vuelve a Belgrado
Argentina pasó a la serie final de la Liga Mundial. Garra y corazón para vencer al seleccionado galo.

La noche del 17 de julio de ´09, en San Juan, quedará en la historia como la primera vez que un seleccionado argentino se metió en la serie final de la Liga Mundial de voley por el mérito de haber sumado lo suficiente (en el ´99 la jugó pero por ser anfitrión). Lo hizo después de vencer a Francia por 3-2(32-30, 22-25, 21-25, 25-18 y 15-7). Ahora jugarán en Belgrado el soñado Final Six.

Los criollos largaron firmes en la recepción y muy precisos en el ataque y por eso la historia comenzó a escribirse desde la ilusión. Siempre apoyado en los "bombazos" del capitán Rodrigo Quiroga, el seleccionado albiceleste llegó a estar siete puntos arriba en el primer set, pero sufrió de lo lindo para cerrarlo.

¿Por qué? Porque saltó a la cancha el opuesto Marien Moreau, encargado de resucitar a Francia. El primer parcial quedó en manos local por un sufrido 32-30, después de varios puntos para set no concretados.

El segundo set fue otra historia, porque el sexteto dirigido por Philippe Blain bajó lo errores (de 15 de la primera manga a 8) y Moreau continuó siendo una pesadilla. La visita clausuró el set por 25-22 tras un mal saque de Nicolás Uriarte y de que Javier Weber les reclamara a sus dirigidos "mayor conciencia para defender cada pelota".

A la vuelta de los vestuarios el trámite fue como en el comienzo y la confianza albiceleste se cristalizó en un 8-6 en el tiempo técnico y un fuerte aliento que cayó desde las tribunas (ver aparte).

Pero el equipo galo nunca baja los brazos y, a pesar de que llegó a estar cuatro puntos abajo, remontó el resultado poniéndole más "pimienta" al saque y apoyándose en un Moreau que empató las cosas en 19. Francia, desde la impecable defensa de Jean Exiga y el contragolpe, sacó diferencia y le puso máxima tensión al partido con un 25-21.

En el cuarto parcial los locales arrancaron abajo, pero dieron vuelta la historia a fuerza de garra y buenos ataques, sobre todo por el lado de Quiroga y un Chávez de enorme personalidad, que cerró el parcial 25-18. Así, todo fue fiesta en el estadio y el quinto set no importó, aunque también fue del sexteto albiceleste.

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