VIEDMA (AV).- Salud Pública formuló un pedido especial de autoaislamiento para las embarazadas. Ello porque si bien hasta el momento no se han podido determinar las razones sí se ha logrado establecer que las mujeres en etapa de gestación "están más vulnerables y ponen en riesgo su vida y la de su bebé ante la posibilidad de contagiarse de esta influenza", según sostuvo la coordinadora del programa Materno Infantil de la provincia, Laura Margaría.
El Ministerio de Salud fue notificado de tres nuevos casos de contagio con el virus de Influenza A (H1N1) en Río Negro, sumando 56, hasta el mediodía de ayer. Se trata de dos pacientes con seguimiento epidemiológico en Sierra Grande y uno en Cipolletti.
De los 56 casos positivos, 16 pacientes residen esta última localidad; 14 en Bariloche; seis en Viedma; igual número en Sierra Grande; cinco en Las Grutas; cuatro en Roca; y sólo uno en Fernández Oro, El Bolsón, Villa Regina, Catriel y San Antonio Oeste.
Laura Margaría destacó que en los últimos 25 días debieron ser internadas más de 10 embarazadas ante la gravedad del cuadro respiratorio que presentaban y que a una joven de 24 años del Valle Medio se le debió practicar una cesárea casi sobre término pero falleció.
Por esta razón desde hace unos días se están monitoreando las embarazadas internadas en Río Negro y "no casualmente una de las primeras medidas de protección para la población fueron las licencias especiales para ellas con el objetivo de evitar el contacto con la gente y sin embargo, se pueden observar haciendo colas en el banco o en el supermercado".
Quedarse en casa
En este sentido Margaría puntualizó que en estos casos la recomendación es el autoaislamiento aunque no estén enfermas. "No es por mantenerlas en prisión sino por una razón de protección y según los expertos no hay respuestas para explicar lo que está pasando con las embarazadas. De allí la licencia especial que se ha recomendado y esa protección se debe extender a su vínculo familiar y cercano para que la ayuden con las compras, los trámites".
Destacó como nuevo que las embarazadas deban estar siendo internadas por afecciones respiratoria, situación que sorprende, a diferencia de los niños que para esta época sí suelen requerir hospitalización por cuadros de bronquiolitis que generan entre 500 y 600 internaciones por año en Río Negro.
Margaría enfatizó además que no está contraindicada la lactancia materna sino que "refuerza la defensa de los niños aún si estos están enfermos y si la mamá lo está y es posible, también es importante que con las precauciones debidas siga amamantando a su hijo".
Ante la sensación generalizada de que en estos días disminuyó la consulta, consideró que puede ser que se trate de una curva epidemiológica o que la gente perdió el sentido de alarma pero "no tenemos que dejar de ver que en pocos días los chicos se reintegrarán a la escuela y habrá que reforzar con los padres qué niños pueden ir, teniendo en cuenta que algunos estarán convalecientes o con síntomas".
En este aspecto consideró que se debe contemplar el tema de la higiene en la escuela en lo que se está trabajando con Educación porque esto no terminó acá y no se sabe cómo sigue".
