BUENOS AIRES.- Luis D´Elía, el piquetero ultra K que integró el gobierno, tendrá que ir a juicio oral por haber interrumpido el tránsito de la avenida Rivadavia el último 7 de mayo, durante una marcha en la cual infructuosamente pidió incluir a dirigentes de su agrupación en las listas de candidatos oficiales.

El fiscal contravencional Claudio Silvestri elevó la causa a juicio oral ante la jueza local Cristina Lara, tras acusar al dirigente piquetero de una serie de contravenciones, según indicaron fuentes judiciales.

En rigor, las contravenciones no son delitos castigados en el Código Penal, pero pueden tener penas como multas, trabajos o hasta arrestos para aquellos infractores que no cumplan con el reglamento impuesto por la Ciudad de Buenos Aires con vistas mantener el orden y la seguridad del tránsito.

Precisamente, el ex secretario de Tierras y Hábitat Social kirchnerista quedó imputado de afectar intencionalmente el servicio público de trasporte y obstaculizar la vía publica, infracciones que imponen penas de hasta 10 días de arresto.

A través de su abogado Adrián Albor, D´Elía rechazó el juicio en su contra: dijo que podría frenarlo pagando 200 pesos porque lo comparó con violar un semáforo en rojo, pero se negó a legitimar "la criminalización de la protesta". Albor también acusó al jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri de buscar que se le pida "permiso" para hacer movilizaciones, y desconoció su autoridad o potestad para autorizar protestas en la Capital Federal.

La polémica gira en torno a la movilización que encabezó D´Elía el 7 de mayo pasado sobre la avenida Rivadavia, desde la estación de tren de Liniers hasta la Plaza de Mayo, trayecto durante el cual cortaron varias esquinas y generaron trastornos.

Así, el tránsito público se vio convulsionado, mientras que la línea A -que hace un recorrido subterráneo por la avenida Rivadavia- también funcionó con numerosas demoras.

La marcha buscaba mostrar el poder de convocatoria de D´Elía para presionar al kirchnerismo en el armado de las listas para las elecciones de junio.

"No queremos listas blancas y marketineras. Queremos pueblo, queremos morochos que nos representen", había reclamado en el discurso que marcó el cierre de la movilización. (DyN)