CENTENARIO (ACE).- La sola advertencia de que serían desalojados por la fuerza bastó ayer para que los desocupados se retiraran de los dos piquetes sobre la ruta y del puente Centenario Cinco Saltos.
Los desocupados que mantenían sitiada la ciudad desde el lunes dejaron en pocos minutos los piquetes ayer al mediodía. Se restableció el transporte interurbano que estaba cortado desde el lunes a las 14, y los vecinos volvieron a transitar tanto hacia Neuquén como hacia Río Negro.
La orden estaba firmada por el juez Marcelo Muñoz y tenía fecha del 13 de julio. Sin embargo, la policía no intimó a los grupos hasta el otro día, según se supo, porque hasta ese momento no se tenía la disponibilidad operativa para el procedimiento simultáneo.
También se conoció que se esperó para la intimación porque hasta ayer continuaban las negociaciones telefónicas entre los líderes de los grupos de desocupados con los funcionarios para evitar el desalojo compulsivo de los punteros.
Al mediodía recibieron la advertencia de que debían cesar en el corte de ruta o serían reprimidos, y resultó la señal inequívoca de que el gobierno no iba a pagarles los subsidios "de inmediato y sobre la ruta", como lo estaban exigiendo.
Por la tarde de ayer, representantes de cada uno de los grupos de punteros emepenistas se reunieron con el ministro César Pérez en la ciudad deportiva. A la reunión ingresaban de a tres por grupo (en total fueron ocho grupos) a la charla con el ministro, según se informó oficialmente desde el ministerio de Justicia, Trabajo, Seguridad y Desarrollo Social.
Oficialmente se indicó que no se contaba con los fondos para hacer frente al pago de programas adeudados, que según cronograma estaba previsto que percibieran a partir del viernes.
No se conocía cuál era el tenor de la reunión de los punteros con el ministro y sus funcionarios.
Los primeros días de junio el ministro Pérez y su gabinete se habían reunido "mano a mano" en una asamblea multitudinaria a la que asistieron la mayoría de los 1.500 subsidiados que dependen directamente de provincia, tras lo cual se esperaba que cesaran los cortes de ruta.
Pero los cortes continuaron al día siguiente y se sucedieron cada semana, y veces más de una vez por semana. Los piqueteros aseguran que el gobierno se compromete a pagarles los subsidios y no les cumple, mientras por su parte el gobierno guarda silencio sobre la situación social y contraprestaciones de los desocupados que sostienen económicamente en Centenario.
Según la orden de desalojo leía por el comisario Víctor González a los manifestantes, debían dejar el corte o serían desalojados por a fuerza en menos de dos horas. La policía filmó y fotografió todo el proceso en la intimación de desalojo, que pudo ser escuchada en vivo y directo por varias radios de la localidad.