La derrota ofrece muchas lecturas en el oficialismo. Jorge Pascual tiene la propia. El titular de la UCR -que consolidó una sólida relación con el gobernador- defiende la autonomía del mandatario en los cambios del gobierno. En la campaña, Pascual promocionó un tercer mandato de Saiz.

-¿La re-reelección se cayó?

-Sí. Ese proyecto, entre otros, no salió posicionado para seguir planteándolo.

-¿Qué otro mensaje recoge?

-Varios. Para adentro, la UCR no fue unida. No supimos contener a todos en la reorganización del partido, ni tampoco atraerlos con la candidatura de Castañón, que la minoría cuestionaba por la forma de elección. Para afuera, se aceptó el desafío de plebiscitar la gestión y fue cuestionada. Agrega otro condimento.

-¿Quedó sí en claro el rechazo a la alianza con los K?

-Sí. Esa alianza nos dejó atrapados en un posición donde no éramos ni anti-K ni demasiados radicales. Ahora, se respetarán las relaciones institucionales con Nación, pero seguiremos la estrategia de la UCR nacional.

-¿Tenía razón (Gerardo) Morales, había que confrontar a los K?

-No sé. Igual, el kirchnerismo ganó en Río Negro.

-¿Van a la Coalición Cívica?

-Primero, hay que rearmar la UCR. Comparto las declaraciones de Chironi (con quien se reunió) de que debemos discutir a fondo la realidad partidaria y buscar un proyecto que contenga a todos.

-¿Y los socios actuales?

-Hay que consolidar la Concertación, la columna de la estructura provincial. Tenemos que trabajar de abajo para arriba porque la posición provincial de esos partidos después no siempre se comparte en las localidades. Y hay que trabajar con las alianzas del ARI y del Frente Grande

-¿Estos diseños de la UCR no quedan relegados ante avances individuales? Por ejemplo, el vice Mendioroz y la legisladora Odarda se muestran aliados.

-Son dos espacios. Mendioroz plantea su alternativa dentro de la UCR y su intención es sumar al ARI, que no es una cuestión cerrada. La posición de Mendioroz será en la UCR y posiblemente puede haber otras candidaturas.

-¿Y el intendente Alberto Weretilneck?

-Hablé del Frente Grande. No se puede descuidar ese acuerdo porque es muy significativo su respaldo.

-¿El intendente tendrá que transformarse en anti-K?

-La política tiene mucha dinámica hay que ver cómo avanza el peronismo al 2011. Weretilneck siempre dice que en Río Negro se siente más contenido y cercano al proyecto de la UCR que del PJ.

-¿Todo demasiado apresurado?

-Se adelantó la elección y se impone otro objetivo. El próximo es el del 2011 y si hay que revertir el resultado, hay que hacerlo con el tiempo suficiente.

-¿Pero la prioridad es el gobierno?

-El gobierno tiene su funcionamiento y la gestión nada tiene que ver con las candidaturas, que no entorpecen ni su funcionamiento ni la estrategia de la UCR.

-El gobierno plebiscitó y se perdió. ¿El 2011 no depende del éxito o fracaso de la gestión?

-Sí. Pero, el gobierno seguirá trabajando para la mejor gestión. Tampoco comparto que el gobernador asume toda la responsabilidad. Todos tenemos que hacernos cargo.

-La autocrítica no alcanza. El gobernador no parece avanzar en cambios.

-Puede ser una lectura. La ratificación o rectificación de rumbos es facultad exclusiva del gobernador. Podemos opinar, pero la decisión es de él. Escuchó todas las críticas, pero en el rumbo se verá cuales aceptó.

-¿Y si no hay modificaciones? ¿Qué hará el partido?

-Será porque no las considera necesarias. (AV)