CATRIEL (ACA).- Las pequeñas aldeas rurales de Peñas Blancas, Valle Verde (cercanas a Catriel) y las neuquinas Octavio Pico y Rincón Colorado están padeciendo las consecuencias del paro petrolero, aunque también arrastran viejas carencias. "La gota que rebasó el vaso fue que pasamos 40 horas sin energía eléctrica por el paro petrolero sin que nadie nos dé soluciones. No hay agua potable y no podemos extraerla de las perforaciones porque no hay electricidad, no tenemos para nosotros ni para los animales".
Así lo expusieron ante este diario Jorge Sánchez Carrillo y Hugo Mauad, entre otros vecinos de Peñas Blancas y Valle Verde. El corte eléctrico fue consecuencia del paro petrolero que dejó sin energía a los equipos de bombeo de YPF y a todos los usuarios esas y otras poblaciones.
"Nuestras comunidades dependen ahora del humor de YPF o de los trabajadores petroleros para disponer de energía. Veremos quién nos va a pagar el lucro cesante", advirtieron.
Valle Verde y Peñas Blancas son los únicos sectores rurales de la extensa jurisdicción petrolera que desarrolla, con recursos propios, importantes actividades agrícolas e industriales. Entre las más importantes se cuentan la bodega que produce el prestigioso vino "Sánchez Carrillo", y emprendimientos ganaderos de mejora genética como el de Daniel Cimolai o el de Tito, con un lote de unas tres mil cabezas de ganado vacuno entre todos los establecimientos. En esta época del año, al cortarse el riego para refacción y limpieza de canales, todo el sector se ve forzado a sacar agua de perforaciones con bombas eléctricas. Pero desde el mediodía del martes se quedaron sin la provisión de electricidad. Es que el sindicato petrolero realizó un paro de actividades y sus operarios cortaron el suministro eléctrico a YPF desde donde sale la línea que provee del fluido a este vasto sector productivo.
Según pudo averiguar "Río Negro", desde la red troncal se le brinda servicio a YPF a través de un convenio. La petrolera dispuso para esto su propio cableado desde donde se envía electricidad a la línea de Valle Verde y Peñas Blancas, aunque los vecinos abonan sus facturas a está última empresa.
Los vecinos gestionaron ante Edersa para que se solucione el problema y en Cipolletti, Carlos Scaglione, le explicó a una de las vecinas que los asesores legales enviaron una nota a YPF y recibieron como respuesta que los trabajadores en su protesta cortaron la energía. Según Patricia de Sánchez Carrillo, Scaglione dejó como única respuesta que nada podían hacer.
Pero no es el único mal que aqueja a estos pobladores. Camionetas petroleras a altísima velocidad, rodados pesados petroleros con más de 70 mil kilos, caminos en muy mal estado, deficiente sistema de salud, ausencia del Estado en políticas de promoción agrícola "a pesar del reiterado discurso de proyectar una economía alternativa", incomunicación total tanto en sistema telefónico fijo como celular, resistencia de taxis y remises a viajar a este sector, son sólo algunos de los serios avatares de estos pobladores.
