NEUQUÉN (AN).- El joven baleado en el basural neuquino se escapó del hospital regional tras ser intervenido quirúrgicamente por los médicos, para sorpresa de la policía que por estas horas lo está tratando de ubicar para que radique la denuncia por haber sido víctima de una tentativa de homicidio.

El hecho ocurrió durante la tarde del martes en el basural ubicado en la zona de la meseta cercano al barrio Colonia Nueva Esperanza. En ese lugar estaba Omar Pincheira (28), quien se dedica a juntar plástico, vidrio y maderas para reciclar.

El joven mantuvo un altercado con un pariente por unas maderas, de acuerdo a escuetos testimonios que pudo lograr la policía, lo que derivó en una riña donde recibió una golpiza seguida por un disparo en la pierna izquierda y otro en el cráneo donde el proyectil le rozó la zona occipital y de milagro no le perforó el hueso.

Pincheira fue trasladado en ambulancia al hospital Heller donde los médicos lo estabilizaron pero por lo grave del cuadro fue derivado al Hospital Regional donde lo intervinieron quirúrgicamente ni bien ingresó al nosocomio.

Según informó la policía, el disparo en la cabeza sólo le hizo un rasguño mientras que el proyectil en el muslo izquierdo como no representaba un peligro se lo dejaron.

Con este proyectil Pincheira ya suma tres proyectiles alojados en su cuerpo, dos de los cuales corresponden a reyertas anteriores.

Los profesionales del nosocomio ni bien lo retiraron del quirófano lo pusieron en una habitación en observación por 72 horas. "Querían ver cómo evolucionaba la lesión de la pierna y si era necesario extraerle el proyectil", confió uno de los pesquisas de la investigación que accedió al parte médico del lesionado.

La sorpresa surgió alrededor de las 3 de la madrugada cuando los enfermeros descubrieron que Pincheira ya no estaba en la habitación. Por lo trascendido, al joven un familiar le llevó ropa por lo que se vistió y se fue. De inmediato se informó al consigna de la policía y comenzó la búsqueda. Lo llamativo es que atravesó todo el nosocomio y nadie advirtió esta situación.

Se supo que Pincheira, quien reside en Colonia Nueva Esperanza, cuenta entre sus antecedentes policiales y judiciales con una condena cumplida por homicidio y robo calificado.

Como hasta el momento no se ha relevado ningún tipo de información respecto a los agresores, salvo que sería un pariente, la policía teme que el joven quiera hacer justicia por mano propia por lo que está siendo buscado intensamente.

La causa que está en manos de la comisaría 20, bajo la caratulada de tentativa de homicidio, a cargo del Juzgado de Instrucción Nº 1.