Durante mucho tiempo se pensó que estos metabolitos cumplían tan sólo una función desintoxicante y no tenían ninguna actividad biológica, sin embargo, se ha encontrado que M6G tiene propiedades farmacológicas similares a las de la morfina. El nuevo derivado, según se desprende de su administración en ratas, es más potente y seguro que el metabolito natural, el M6G.

Los investigadores también analizaron a qué se debe la mayor eficacia del nuevo compuesto. La conclusión a la que llegaron es que se trata del distinto comportamiento dinámico de ambas sustancias más que una modificación de su estructura molecular lo que explica su eficacia. Esta parte del trabajo la realizó un grupo dirigido por Jesús Jiménez-Barbero del Centro de Investigaciones Biológicas (CSIC) en Madrid.

Algo interesante de señalar, por lo poco frecuente, es cómo se financió el proyecto de investigación. Lo hizo la Fundació La Marató de TV3, una iniciativa del canal de televisión TV3 que recoge fondos por suscripción popular para el estudio de una determinada enfermedad y los adjudica luego mediante una convocatoria pública evaluada por expertos internacionales.

Según Valencia y sus colegas, los resultados obtenidos en esta investigación pueden ser el punto de partida para el diseño de nuevos y mejores analgésicos para el tratamiento de los dolores crónicos.