BUENOS AIRES (DyN).- Cuando Argentina aún no declara la emergencia nacional y subsiste un atomizado accionar en el combate contra la gripe A, escuelas, institutos y universidades públicas y privadas, como así también museos, bibliotecas y centros culturales, iniciaron una reprogramación de funciones con el mínimo personal a cargo y con actividades educativas a distancia.

Más allá de los acuerdos de las jurisdicciones argentinas de adelantar y extender el receso de invierno hasta el 3 de agosto en escuelas públicas y privadas, se escuchan algunas voces críticas hacia la convocatoria de las autoridades escolares a asistir a los establecimientos a prestar servicios, en una suerte de ruptura de la veda durante los días considerados clave para el contagio.

Tal es el caso de las seccionales de los docentes privados de SADOP, que denunciaron que "algunos sectores de la patronal presionan a los maestros para que concurran a cumplir tareas en los mismos edificios donde los alumnos están impedidos de asistir".

En la Ciudad de Buenos Aires, en tanto, el ex Defensor Adjunto Gustavo Lesbegueris, pidió al gobierno de Mauricio Macri que "garantice el acceso al servicio de alimentación a los alumnos de nivel inicial y primario, y preguntó a las autoridades si "en el marco del receso dispuesto se había previsto garantizar el acceso al servicio de alimentación que brindan las escuelas a las que asisten.

En las 39 universidades públicas del país, en tanto, según dispuso el ministerio de Educación nacional, de las que dependen y los propios rectores, se tomaron en forma individual medidas y decisiones respecto a continuidad de las actividades pedagógicas, cierres, desinfecciones y otras, en relación a su realidad y entorno en cada provincia.Los rectores de las universidades estatales del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) argumentaron que el hecho de no haber emitido directivas en relación a la situación de la gripe A H1N1 "no fue por despreciar las consecuencias de la epidemia, sino por entender que las medidas deben ser tomada en consonancia con las recomendaciones de los comités sanitarios y la situación particular de cada región".