A través de un decreto, el gobernador Jorge Sapag facultó al ministro de Salud Daniel Vincent a "convocar" anestesistas en el sector privado para que garanticen la cobertura de pacientes en el sistema público.
El decreto, que todavía no tiene número, pero según informó el subsecretario de Salud Gustavo Curtino, ya está firmado por el jefe del Ejecutivo, trae a colación la ley provincial 578, de Ejercicio de la Medicina, que fija que los profesionales matriculados en Neuquén tienen la obligación de prestar la atención requerida por autoridades sanitarias cuando haya epidemias, desastres u otras emergencias.
En Neuquén hace unos cinco años que la falta de anestesistas, con algunas intermitencias, se registra y tiene impacto directo en las cirugías programadas del ámbito público.
Ahora último, el conflicto tendió a recrudecer. Las autoridades provinciales afirman que la Asociación de Anestesiología del Neuquén, se rehúsa a atender pacientes en clínicas privadas desde el primero de junio. Y que para volver a prestar el servicio, piden una suba del 100%, entre otras solicitudes.
Otra acusación que recae sobre los anestesistas es la de que buscar una reducción en el número de residencias de la especialidad que se capacitan en el hospital Eduardo Castro Rendón, uno de los últimos bastiones de la medicina pública a nivel nacional donde, por ley, se capacitan todos los años seis nuevos especialistas.
La subsecretaría de Salud informó que la Asociación viene reclamando una readecuación del 100% de las prestaciones que los anestesiólogos dan en el sector privado a pacientes derivados. Con el decreto, la provincia, cuando convoque de forma directa a un anestesiólogo, algo para lo que queda facultado, le pagará el valor que Neuquén paga tanto en el público como en el privado.
Agencia Neuquén del Diario Río Negro.-