Va por ti mi canción.Tú que siempre me adorabas y me mimabasy me llevabas de tu mano a pasear.Cuántas veces recé para que el tiempo no pasaray me quedara la alegría de no tenerte que perder.Abuelo, mírame, mira cómo he crecido,sigo siendo tu niño, sigo tu camino;todo lo que tengo te lo debo a ti.Abuelo, mírame y escucha mi canción;vengo a darte mis besos y mi corazón.Esta poesía no sé de dónde la saque o simplemente si la copié de algún lado. No importa, sólo quiero hacerla mía y está dedicada a los Grandes Cantores Neuquinos. Un grupo de gente grande, gente de la tercera edad, abuelos que sienten en el canto su forma de vivir y disfrutar la vida. Jóvenes de la tercera edad que brindan un verdadero ejemplo de vida, personas con un carisma muy especial, con altos valores y fundamentalmente con pasión por lo que hacen y de lo cual, se nota, están muy orgullosos.A esta edad es una fortuna y una forma de compartir, reunirse y expresar sentimientos.Es una terapia, ya que los que están en esta etapa de sus vidas tienen la mente un poco cansada y necesitan revitalizarse. Es compartir sentimientos profundos y llevar a cabo sueños de otros momentos de sus vidas. La música los mantiene vivos, les llena el espíritu y, cuando están lejos del coro, extrañan a sus compañeros.Cabe destacar que cada vez que hablan los abuelos se les cristalizan los ojos al recordar los gratos momentos vividos en las constantes giras dentro y fuera de nuestra provincia e irradian una ternura indescriptible.En estas pocas líneas quiero agradecer a los integrantes del coro Grandes Cantores Neuquinos y a su director musical, Marcelo Piñeiro, el haberme permitido participar en este hermoso desafío y el tiempo que me han regalado para que a esta altura de mi vida vuelva a ser feliz cantando.Fernando Frexas, DNI 7.764.559 Nora Inés Fernández, DNI 10.981.543Neuquén