ZAPALA (AZ).-Los subsidiados del centro neuquino que mantienen tomado el Concejo Deliberante de Zapala lograron frenar anoche un desalojo inminente ordenado por la justicia. A cambio de evitar la medida, accedieron a abrir uno de los portones laterales para permitir la salida de varios vehículos que habían quedado como "rehenes" del conflicto.
De todas formas, se mantienen en el interior del edificio a la espera de una respuesta del gobierno sobre sus reclamos por el pago de salarios atrasados, entre otras promesas incumplidas de la provincia. Anoche se vivieron momentos de extrema tensión el Concejo zapalino cuando numerosos efectivos del grupo especial de operaciones de la policía se desplegaron para entrar en acción. Finalmente, los líderes de la protesta, acordaron descomprimir la situación permitiendo la salida de los automóviles retenidos.
En tanto, se conoció que la defensora de los derechos del niño, Gabriela Calaccio, envió un exhorto a los manifestantes a fin de que todas las mujeres y menores que se encontraban en el lugar se alejaran del mismo.
Uno de los voceros del grupo, Jorge Urrutia, anunció que hoy se retomará el diálogo con el ministro Jorge Tobares a fin de lograr una solución.
"Esta situación es responsabilidad del gobernador Jorge Sapag quien con sus reiterados incumplimientos sólo logra generar incertidumbre entre los trabajadores", aseguró el concejal Ricardo Pérez, de Une, quien agregó que "a nivel personal no voy a participar de nuevas negociaciones con la provincia porque sus funcionarios mienten descaradamente". El edil disparó munición gruesa contra el gobierno neuquino a quien acusó de "no ofrecer voluntad para resolver el conflicto con los subsidiados del centro de la provincia".
En tanto, desde el oficialismo municipal no ocultaron el malestar frente a la toma. En este sentido funcionarios cercanos al intendente Edgardo Sapag cuestionaron la decisión de subsidiados de localidades y parajes vecinos como Mariano Moreno y Ramón Castro de llevar adelante el reclamo en Zapala.