NEUQUÉN (AN).- El oportuno llamado telefónico a la comisaría, la rápida reacción de una patrulla policial y la impunidad de dos delincuentes que se confiaron demasiado, fueron los ejes centrales de la detención de los sujetos cuando huían con dos cubiertas robadas. Tras una persecución fueron atrapados.
El episodio ocurrió en la tarde del viernes en el barrio Don Bosco, en el sector sur de la ciudad. Confiados porque evidentemente ya habían perpetrados este tipo de robos, los delincuentes -que permanecen a familias que se dedican a comercializar vehículos-, se abocaron a poner en práctica una estrategia repetida: sacar las cubiertas de un rodado estacionado.
Estaban en esa tarea cuando fueron vistos y si bien alcanzaron a irse con el botín, intervino un patrullero de la Comisaría 41 que circulaba por el sector y los detuvo, cuando ya se alejaban de la zona en un utilitario Saveiro.
Sorprendidos y sin posibilidades de intentar algún ardid, los sujetos fueron reducidos y trasladados a la Comisaría Segunda, donde quedaron arrestados.
Las fuentes policiales consultadas informaron que los sujetos tienen antecedentes por haber protagonizado este tipo de delitos.
Cabe señalar que el robo de cubiertas de autos estacionados, se ha convertido en un fenómeno de controlar en la ciudad.
Y en más de una oportunidad los autores ser miembros de una comunidad dedicada a la venta de autos.