Mientras las dudas sobre la muerte de Michael Jackson crecen, su familia decidió el traslado del cuerpo a un lugar desconocido aún, seguramente para practicarle una autopsia independiente.
Son sobre todo sus familiares los que más dudas tienen sobre la muerte del Rey del Pop. Es que ellos siguen sin tener información sobre las últimas horas de "Jacko" y tres días después de su muerte no consiguen contactar con el médico que lo trató.
La sospecha apunta a que el cardiólogo le haya inyectado una dosis del potente analgésico Demerol, parecido a la morfina. De hecho, el sitio de internet especializado en las celebridades TMZ.com -que tuvo la primicia de esta muerte- informó que a Jackson se le administró una inyección del analgésico demerol, aproximadamente una hora antes de que perdiera la conciencia.
Luego de eso, de intentar vanamente reanimarlo y del llamado al 911 que se conoció el viernes, el cardiólogo Conrad Robert Murray abandonó la lujosa vivienda de Jackson en Los Angeles. Ahora no responde a las llamadas de la familia.
Según la policía, el médico no está considerado sospechoso, pero los agentes incautaron su vehículo tras la muerte del ícono del pop. Por el momento no se sabe si el cardiólogo privado de Jackson ha sido interrogado por la policía. La autopsia reveló que no había señales de un acto criminal.
"Ellos sospechan de este médico y tienen razones reales porque cualquier otro médico hubiese dicho, ´esto es lo que pasó en la última hora de su vida y yo estaba allí. Yo le di tal medicina´. (Pero) él abandonó el lugar, y su automóvil", dijo el reverendo Jesse Jackson, que pasó el viernes con los familiares como consejero espiritual. "¿Cuándo llegó el doctor? ¿Y qué hizo? ¿Lo inyectó? Y si lo hizo, ¿qué le inyectó?", se preguntó. "Su ausencia levanta dudas sustanciales que no se disiparán hasta que sean respondidas", insistió.
Lo cierto es que el cardiólogo llegó a estar donde estaba a pedido de Michael Jackson. Fue él el que insistió en que la nómina de su promotor de conciertos incluyera a su médico personal, un cardiólogo con problemas financieros.
Así, el doctor Conrad Murray fue contratado por AEG Live para que acompañara al artista de la música pop a Londres para su serie de conciertos, dijo Randy Phillips, presidente y director ejecutivo de AEG Live. "Como compañía, hubiéramos preferido no haber tenido un médico de tiempo completo porque hubiera sido más barato sin los hoteles y viaje, pero Michael fue insistente para que lo contratáramos", dijo Phillips. "Michael dijo que había un buen entendimiento con él´´.
La primera autopsia no mostró señales de traumatismo en el cadáver de Jackson, cuyo fallecimiento ocurrió apenas unas semanas antes de que comenzara lo que iba a ser un regreso épico a los escenarios, en una serie de 50 conciertos en Londres.
La policía enfatizó que el doctor no es sospechoso de hecho penal alguno. El determinar la causa de la muerte será una tarea que requerirá más análisis, los cuales podrían demorar entre seis y ocho semanas, dijo un portavoz del forense del condado de Los Ángeles. Y añadió que Jackson tomaba algunos medicamentos no especificados que le había prescrito un médico. Algo que ocurría desde hace rato: cuando Jackson fue absuelto de abuso de menores en el 2005, los fiscales pidieron no devolver a Jackson algunas jeringas, el fármaco Demerol y recetas para varios medicamentos.