Independiente terminó el Clausura con la cara tan larga como la que exhibió en gran parte del torneo. Equipo sin luces ni alma más allá de nombres y tácticas, jugadores insultados y un técnico abrumado por la adversidad. De todas maneras Américo Gallego, como todo Independiente, puede respirar tranquilo: el certamen al fin ha terminado.

El Tolo sabe que deberá trabajar y mucho para revertir la imagen de un equipo que se preparó para campeón y terminó en los últimos puestos de la tabla. "Yo creo que el próximo semestre tiene que ser el mejor. Tenemos que mejorar mucho para hacer un equipo competitivo y por lo menos hay que traer tres jugadores de experiencia porque hay muchos chicos", declaró el director técnico en conferencia de prensa tras el empate 1-1 con Arsenal en Sarandí.

Gallego no tuvo contemplaciones con aquellos, que ha pesar de las chances, no supieron aprovechar su momento. "Algunos jugadores no van a tener otra oportunidad", adelantó el técnico quien ya manifestó su deseo de no trabajar con más de 30 profesionales.

Uno de los que no seguiría en el club es Leandro Gioda, muy insultado por los hinchas en el primer tiempo. Ante esta situación el zaguero le pidió al DT que lo cambie para el complemento.

El Tolo al ser consultado por el tema, explicó: "Me pidió el cambio porque lo estaban insultando mucho y no estaba en condiciones de seguir. Lo entendí, pero es difícil dejar a un equipo así, sobre todo un hombre de experiencia como él. Desde que soy entrenador nunca me pasó una cosa igual. El hablará con la comisión y verán qué hacer, pero por lo que hizo esta vez no debe tener más ganas de jugar acá", agregó.

Antes de despedirse, Gallego aclaró que para darle forma al futuro equipo pondrá hincapié en los juveniles: "Voy a poner a los pibes y a los que me traiga el presidente", se despidió el Tolo con más cara de resignación que de esperanza.