CATRIEL (ACA).- La comunidad mapuche de Catriel a la que pertenece la familia de Valentín González retiró ayer a las 14 el cuerpo de su familiar fallecido en febrero, para cumplir con la ceremonia de inhumación en el campo en el que viven. No tenían permiso del municipio, que les negó esa posibilidad y la justicia rechazó un recurso de amparo aduciendo que el campo en el que viven no le pertenece a la familia sino a la comuna, aunque el tema está en litigio.
Los septuagenarios padres del occiso -Valentín González y su esposa Margarita Aránguez- junto a sus hijos y al resto de la comunidad mapuche llegaron al cementerio local en cuyo depósito estaba el féretro con los restos de Horacio Ismael González. Una vez que el cuidador abrió el depósito, le acercaron al empleado un acta en la que comunicaban que retirarían el cajón y que se hacían responsables de esta acción. El cuidador les dijo que no podía permitirlo porque lo comprometían e inmediatamente llamó a la policía, mientras el grupo se iba con el ataúd.
Minutos más tarde una gran movilización de policías se lanzó hacia el "lote 4" donde viven los González pero cuando llegaron ellos estaban haciendo la ceremonia ancestral para sepultar al finado. Los policías con cuatro móviles cerraron los acceso al campo pero luego de informarse y de tomar los datos del lonko de la comunidad se retiraron.
"Vos sabés lo que es soñar con tu familiar que te pide que lo lleves al campo", dijo Sonia Marín sobrina del occiso.