Un reclamo de entradas o de reparto de los beneficios de venta de gaseosas y hamburguesas, la muerte de un familiar de los jefes de la barra y la vendetta fueron los tres pasos que completaron una noche de sangre y terror entre Barracas y Parque Patricios.

Fue la mácula de una noche que venía de fiesta para los hinchas del Globo que sienten al alcance de la mano repetir la gloria del 73. Según se supo, los barras del minoritario grupo de La Zabaleta, residente en esa villa cercana al estadio Tomás Ducó, fueron a intentar hacerse fuerte en la barra y tener participación en las entradas y la venta de gaseosas y hamburguesas.

Inclusive un hombre que dijo ser familiar de Fernanda Nievas, herida ayer a la noche, sostuvo por radio "La Red" que el problema era por "las gaseosas". A decir del titular de la Subsecretaria de Seguridad en Espectáculos Futbolísticos (SUBSEF), Pablo Paladino, "a las 20.30 de la noche cuatro personajes van a buscar a Fernando de Respiris". De Respiris es el hermano menor de Cone y del Narigón Pablo y terminó acribillado a balazos en Barracas.

Luego llegó la vendetta de los grupos La José C. Paz (por el nombre de la plaza ubicada en José C. Paz, Pepirí y Cortejarena) y El Pueblito, los que dominan la barra del Globo. Fueron a buscar al supuesto matador en la Villa Zabaleta y terminó herida Nievas.

Los de la José C. Paz no encontraron a quien buscaban y aprovecharon la cercanía con el hospital Penna para la emboscada final, donde murió Orlando Sosa, que llevaba a Nievas. Según Paladino "este Sosa que muere dentro del hospital no tiene nada que ver con Huracán".

Paladino dijo que "la gente de la villa Zabaleta es repudiada por los hinchas de Huracán porque van a la cancha a robar". Es decir, el funcionario conocía el dominio de los barras.