ALLEN (AA).- Dos accidentes de tránsito ocurridos ayer en la intersección de la calle rural asfaltada Nº 4 y el acceso Güemes de Allen, volvieron a poner en el tapete la urgente necesidad de realizar obras viales para aminorar la velocidad de los vehículos en ese riesgoso cruce.
Por la mañana colisionó una moto contra una camioneta y en la tarde un auto contra un patrullero. En ambos casos se registraron heridos.
Con el paso de los días la peligrosidad continúa acrecentándose en los cruces de la calle rural asfaltada Nº 4 y los ingresos a la ciudad de Allen. Es que el camino rural se convirtió en la vía elegida por autos, camiones y motos para unir las localidades vecinas y evitar los cientos de baches que conserva la ruta provincial 65.
Justamente sobre la calle asfaltada Nº 4 existen carteles indicativos y líneas amarillas en cada uno de los cruces. Pero el alto grado de siniestralidad que se viene registrando en esos puntos demanda otro tipo de medidas y se hace indispensable pensar en la construcción de lomadas.
El primero de los accidentes de ayer sucedió minutos antes de las 11 en el cruce de la calle rural Nº 4 y el acceso Güemes. En ese momento una motocicleta "Motomel" 150 cm3 que transitaba por el camino asfaltado en dirección Oste-Este, impactó contra el paragolpes trasero de una camioneta Toyota Hilux dominio GOT 680. La camioneta marchaba por el acceso Güemes en sentido Norte-Sur. Como consecuencia del choque el conductor de la moto, Denis Fernández (22) y su acompañante, Nadia Filip (20), sufrieron heridas de distintas consideración. Los jóvenes, que son oriundos de General Roca, viajaban hacia esa localidad con el casco colocado.
Por la tarde y pasadas las 15, el cruce del acceso Güemes y la calle Nº 4 volvió a ser el escenario de un nuevo accidente de tránsito. El choque se produjo entre un patrullero de la Unidad Sexta de Allen y un Renault 11 en el que se trasladaba una familia de San Martín de los Andes. Al momento de la colisión, el Renault 11dominio UCQ 460 circulaba por la calle asfaltada Nº 4 y el patrullero lo hacía por el acceso Güemes. El móvil policial fue embestido en uno de los laterales por el Renault 11, hizo un trompo y terminó impactando contra una columna de hormigón. Ambos vehículos registraron importantes daños materiales.
Según informaron fuentes policiales, el Renault 11 era conducido Gabriel Luquet, quien viajaba acompañado por su esposa, María Laura Troyas y su hijo, menor de dos años. Luquet sufrió un fuerte golpe en una de sus rodillas mientras que el cabo primero de la unidad sexta Mario Vera, que iba a bordo del patrullero, presentó fracturas costales múltiples.