Doris Capurro es socióloga y dirige la consultora "Capurro y Asociados", que a su vez integra Ibarómetro, especializada en medición de opinión pública. Fue una de las organizadoras del "V Seminario de Management Político y Campañas Electorales: el caso Obama". En la charla con "Río Negro" destaca que "internet fue sólo el vehículo de una gran idea, de un gran candidato para un momento político muy especial en favor del cambio. No fue la razón de ser del triunfo y de la capacidad movilizadora de Obama".

- ¿Cuáles fueron las conclusiones más importantes del análisis de la campaña de Obama?

- Tal vez la más importante: Obama no ganó sólo porque tuvo una estrategia innovadora en términos de la comunicación digital, sino porque verdaderamente representó un cambio en la forma de encarar una concepción de la política y una transmisión de un objetivo. "Cambio" fue la palabra que sintetizó la estrategia, variar la forma de recolectar fondos electorales, las herramientas usadas, la participación ciudadana dentro de la campaña, los proyectos concretos que presentó. Toda esta reforma permitió que Obama creciera no sólo en intención de votos sino también que generara una enorme participación de ciudadanos jóvenes hasta entonces apartados de la política y sumar adherentes en varios países.

- ¿Hay un antes y después del caso Obama en el marketing político, en cómo encarar las campañas?

- Sí. Básicamente el modo en que usó las nuevas tecnologías dentro de la campaña. La ventaja de internet sobre los medios tradicionales es que permite no sólo informar, comunicar los proyectos de uno sino escuchar a los ciudadanos. Esto introduce un cambio de paradigma en la comunicación política.

- ¿Por qué?

Porque la red permite a los ciudadanos participar activamente, opinar. Todos pueden reenviar mensajes del candidato, recomendarlo o comentar sus propuestas con sus contactos, mandar ideas para la campaña. Hoy se hacen spots televisivos con ideas que lleva la gente. El cambio de paradigma no es sólo en la campaña porque Obama redobla la apuesta y continúa con el contacto en la presidencia con un sitio que abre la Casa Blanca a los ciudadanos, con sugerencias o aportes a iniciativas del gobierno.

- ¿No hay un fin de los partidos como organizadores de participación?

- No, en Estados Unidos los dos partidos son muy fuertes, clarificando el panorama político y el electorado. Pero definitivamente hay un porcentaje enorme del Partido Republicano que ha volcado su apoyo por el demócrata Barack Obama (casi el 80% de apoyo). Éste propone una especie de transversalidad de partidos, reclutando a republicanos técnicamente capaces para su gobierno, por lo que revoluciona también en este sentido la política.

¿Hay paralelos con la campaña argentina actual?

- Algunos quieren imitar las cosas formales de la campaña de Obama y copian frases publicitarias, otros tratan de adaptar positivamente los mecanismos. Pero también tiene su influencia desde el punto de vista político profundo. Con Obama en el gobierno de EE. UU. en medio de esta fenomenal crisis económica mundial, hay un cambio de paradigmas sobre temas políticos globales, como el rol económico del Estado. Por eso, parte de las propuestas que se discuten hoy en la campaña argentina tiene también que ver con eso. Existe un sector que asume la posición republicana defensora del libre mercado o "neoliberal" , y otra parecida a la de Obama, que señala la ausencia del Estado como una de las causales de la crisis.

- Acá ¿alguna de las fuerzas intentó generar el nivel de participación de la campaña de Obama?

-No. Hay intentos de gran despliegue en internet, pero eso sólo no alcanza. Otros buenos, todavía en pañales, como el de Sabatella, ex intendente de Morón, que usa intensamente Twitter o Facebook para convocar a la participación, ya que no tiene la fuerza económica para jugar las grandes ligas de la campañas publicitarias. Pero hay que aclarar que la inversión de Obama en el área tecnológica fue importante, con cuatro años de anticipación. Una campaña no se improvisa de la noche a la mañana. Igual, las cosas que se usaron en Estados Unidos se intentan aprender acá. De Narváez copió la idea del "nosotros" de Obama y la cambió por la de "usted". La idea: "El cambio no lo hago yo sino usted", es claramente extraído de allá.