Los grupos opositores utilizan por ejemplo Twitter para organizar manifestaciones contra los resultados
electorales anunciados oficialmente. Mientras, en Facebook se dan indicaciones de qué arterias de Teherán deben evitarse por la presencia de soldados del gobierno. Usuarios de Twitter como
"persiankiwi" (http://twitter.com/persiankiwi), que informa directamente desde Irán sobre los sucesos actuales, cuentan ya con decenas de miles de abonados.
Con ello, los usuarios de Internet
pueden convertirse en todo el mundo en testigos de un suceso que el régimen de Teherán preferiría ocultar a la opinión pública mundial. Todo, aun cuando la veracidad del contenido de las informaciones
aparecidas en la red no pueda garantizarse. Ante ese estado de las cosas, muchos expertos se preguntan durante cuánto tiempo podrán utilizarse sin censura en Irán Twitter, Facebook, YouTube y otros
servicios similares. Jonathan Zittrain, profesor de Derecho de la Harvard Law School, describe en su blog futureoftheinternet.org, que Irán cumple todas las precondiciones para un bloqueo técnico de
Internet.
Después de que el régimen utilizara un software de filtro de Estados Unidos para bloquear el acceso a webs indeseadas, ahora está en condiciones de censar la web con un sistema de desarrollo
propio. Para apagar una red social como Twitter no basta sin embargo con bloquear la homepage del servicio de mensajes cortos (www.twitter.com), ya que Twitter permite el acceso mediante los llamados interfaz de programación de aplicaciones o API (del inglés Application Programming Interface), que abren Twitter a programas y servicios de red de otros ofertantes.
Sin embargo, no garantizan
necesariamente la estabilidad técnica de Twitter. Esa "técnica caótica" no sólo exige con más frecuencia que Twitter haga trabajos de mantenimiento, sino que es un importante causante de la dificultad
y complejidad de llevar a cabo una censura efectiva del conjunto del sistema Twitter. Según una información del diario "The Washington Times", el gobierno estadounidense quiere pedir ahora a la empresa Twitter, asentada en California, que retrase sus trabajos de mantenimiento por el papel que está desempeñando en las protestas en Irán.
"Les dejamos claro que representan una importante forma de comunicación", manifestó un alto funcionario del departamento de Estado estadouniense. El cofundador de Twitter Biz Stone se mostró poco contento con la injerencia del departamento de Estado, entre otros motivos porque no cree que la red deba estar a las órdenes del gobierno: "El departamento de Estado no tiene influencia en nuestro proceso de decisión", escribió Stone en su blog.
Pero los sucesos están siendo seguidos en estos momentos en tal medida en todo el mundo, que parece que Twitter y su servidor técnico NTT America retrasarán la pausa de mantenimiento. "Sin embargo ambas partes
(Twitter y el departamento de Estado) pueden estar de acuerdo en que un intercambio de información supone una fuerza positiva en el mundo", matiza Stone.
DPA