ROMA (DPA) - La debilidad del primer ministro Silvio Berlusconi por mujeres jóvenes y bellas volvió ayer a los titulares de la prensa italiana.

El diario milanés "Corriere della Sera" publicó ayer que un empresario de la ciudad de Bari, en el sur italiano, habló por teléfono de jóvenes mujeres a las que se les pagó por participar de fiestas del jefe de gobierno en sus mansiones en Roma y Cerdeña.

Una de las invitadas, llamada Patrizia D´Addario, asegura que asistió a dos fiestas en la residencia del premier. Y que le pagaron 1.000 euros por viajar desde Bari, en el sureste de Italia, para asistir a una de ellas. Pero no sólo eso; también aseguró que le ofrecieron una candidatura local en un partido afiliado al de Berlusconi.

Actualmente se investiga al empresario de Apulia, que conoce a Berlusconi hace años, por inducción a la prostitución. Fuentes de la justicia en Bari confirmaron que, debido a esta sospecha, actualmente se investiga "en localidades exclusivas en Roma y Cerdeña".

"Otra vez los diarios se llenan de basura y mentiras", comentó Berlusconi sobre los reportes. Sin embargo, convocó para esta tarde al ministro de Justicia italiano Angelino Alfano y a su abogado Nicolò Ghedini .

El primer ministro italiano, de 72 años, recientemente hizo confiscar cientos de fotos del paparazzo Antonello Zappadu, entre ellas imágenes de una fiesta en la que estuvo invitada la joven Noemi Letizia, entonces de 17 años. La cercanía de la muchacha al primer ministro desató un escándalo en Italia e incluso un pedido de divorcio de su esposa.

El primer ministro afirmó no haber tenido ninguna relación con menores de edad.