SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El fiscal Eduardo Fernández formalizó esta semana el pedido de juicio oral y público contra Héctor Goye, procesado por el presunto delito de estelionato en la venta de dos terrenos de Melipal III, el polémico loteo de la cumbre del cerro Otto.

La requisitoria se sustenta en la causa "Goye Héctor, Bracamonte, Lago Martin y Marquina A. sobre estafa", en la que los últimos tres mencionados fueron sobreseídos. Sin embargo, la conducta de Goye fue reencuadrada en la figura de estelionato, que prevé una pena máxima de 6 años de prisión.

En su escrito, Fernández sostuvo que "Goye indujo a engaño a los compradores en cuanto a la calidad de la propiedad", ofreciendo la posibilidad de "escriturar a su nombre y disponer libremente de un bien que, de acuerdo a las circunstancias planteadas, resultaba imposible".

Entre abril de 2005 y el mismo mes de 2006, Hernán Rodríguez y su mujer compraron dos lotes a Goye, a 15.000 dólares cada uno, para construir su casa e iniciar un emprendimiento turístico. Pero nunca pudieron escriturar ni disponer de las tierras. Se enteraron de la precaria situación dominial de ambos inmuebles cuando iniciaron los trámites de obra y el municipio les negó todo permiso por la ausencia de escrituras de la fracción que, según informó la dirección de Catastro, pertenece a la empresa "Lagos del Sur". Ante la imposibilidad de disponer de las tierras y de recuperar el dinero, la pareja recurrió a la justicia para denunciar la estafa.

Y pese a que la causa por defraudación especial se encuentra a un paso del juicio oral, un operador inmobiliario sigue ofreciendo en internet el conflictivo loteo, pero sin mayores precisiones ni nombre del contacto.

Hasta mayo pasado en el mismo sitio de negocios -MundoAnuncio.com.ar- el aviso que promocionaba Melipal III aseguraba que "Los lotes son todos propiedad de Héctor Goye".

El Fiscal reconoció que Goye "posee derechos sobre la zona" que le fueron vendidos por los hermanos Book y Jorge Angerami, pero advirtió que "el imputado no podía desconocer" los eventuales litigios de cualquier operación inmobiliaria por la rescisión de esos derechos planteada por los Book, que "se comportan como los titulares del lugar, ejercen actos posesorios y los ofrecen en venta", detalló.

Fernández concluyó que "estos hechos eran conocidos por Goye y fueron ocultados a los denunciantes, ocasionándoles una situación de engaño" y "un perjuicio económico". En su requisitoria pidió además que extraigan "fichas dactiloscópicas por triplicado" del acusado y que se requieran sus antecedentes al Registro Nacional de Reincidentes.