NEUQUÉN (AN).- En medio de la noche y con cuatro equipos en simultáneo, los inspectores municipales de Comercio y un grupo de agentes policiales desarticularon ayer 18 puestos de vendedores ambulantes del Bajo de la capital neuquina. El operativo, que culminó con el secuestro de cuatro camionetas repleta de mercaderías, fue el primero de una serie que buscará erradicar la venta ambulante de la ciudad.

En tan sólo una hora el tradicional aspecto de la zona comercial cambió radicalmente cuando desde las 19,30 la comuna comenzó a secuestrar todas las mercaderías que estaban a la venta en las veredas. Entre corridas y gritos, algunos puesteros lograron retirarse antes de que el control les cayera encima. El resto no tuvo la misma suerte: fueron sorprendidos y la posibilidad de que recuperen sus productos dependerá de la decisión que adopte el titular del Juzgado de Faltas 1 de esta ciudad, Gabriel Calabrese.

"Este es operativo de barrido de vendedores ambulantes porque queremos erradicarlos de la ciudad, porque para eso hace años se construyeron las tres ferias que hoy se conocen como Los Pulgas", detalló el responsable del operativo, el subsecretario Legal y Técnico Fabricio Torrealday. Y agregó que "ahora les vamos a pedir que tengan residencia en la ciudad y que presenten un certificado de antecedentes policiales".El funcionario detalló que "hace algunos años habíamos logrado ordenar a los 40 vendedores que había y organizarlos en una suerte de comisión interna. Pero ahora son más del doble, están descontrolados y muchos ocupan tanto espacio que no se puede caminar".

Como resultado del operativo en el que participaron seis efectivos de la Comisaría Segunda, doce inspectores de Comercio y cuatro móviles municipales, se secuestraron los elementos de puestos comprendidos en los rubros bijouterie, CD-DVD, artículos de regalería, artesanías y alimentos. "La decisión de si van a poder o no recuperar las mercaderías dependerá del juez de Faltas y de que puedan comprobar que son los dueños de lo que estaban vendiendo, pero hay detalles llamativos porque por ejemplo la bijuoterie es idéntica entre los puestos y en todos los casos tenían las mismas cajas para guardarlas", dijo Torrealday.