NEUQUÉN (AN).- Dos menores ingresaron al CPEM 76 y dispararon con una tumbera dentro de las instalaciones del colegio. El proyectil de goma no salió con potencia y nadie resultó herido. Hace una semana que el colegio está sin clases porque se considera que no están garantizadas las condiciones de seguridad.
El hecho que ocurrió el martes de la semana pasada salió a la luz recién ayer cuando Sergio Garrido, vicedirector del colegio, narró lo sucedido.
"Desde que se retiró el servicio de seguridad de las escuelas se vienen dando situaciones de violencia bastante complicadas", explicó el docente del establecimiento del barrio Melipal.
"No tenemos clases desde el martes de la semana pasada porque dos chicos del barrio ingresaron a la escuela drogados y con un arma buscando a alguien. La cosa es que con una tumbera dispararon un cartucho que por suerte salió con poca potencia por lo que los perdigones de goma no dañaron a nadie. Esto nos motivó a suspender las clases y pedirle seguridad al Consejo Provincial de Educación", dijo Garrido.
Para el docente los menores agresores son chicos no escolarizados que conforman las bandas o patotas del barrio que luego terminan enfrentados entre sí.
Por su parte, la policía confirmó el incidente. "Aparentemente fueron menores pero no hubo detenidos ni se secuestraron armas", confió una fuente policial.
Por ahora los efectivos de la comisaría 21 realizan rondines por el establecimiento en los horarios de ingreso y egreso y también durante la siesta, cuando los estudiantes acuden a la clase de gimnasia.
El directivo confió que durante la tarde de ayer la comunidad educativa mantendría una reunión en la que definirían los pasos a seguir dado el caso que el CPE no cumpliera enviándoles guardias de seguridad.
Este es el segundo hecho con armas dentro de un colegio; el anterior se registró en el CPEM 19 del barrio Sapere donde un chico de trece años sacó de la mochila un revólver calibre 38 y amenazó a un compañero con el que también está enfrentado fuera de la escuela.