NEUQUÉN (AN).- El ministerio de Seguridad y la Policía aguardan que la cartera de Hacienda autorice y gire unos 90.000 pesos para realizar el examen preocupacional a los 550 aspirantes a ingresar a la Escuela de Agentes. Las clases todavía no han comenzado y ya está previsto que el curso, que aún no saben cuando arrancará, se extienda hasta 2010.

El ministro de Seguridad, César Pérez, reconoció esta situación y aseguró que esperan que "Hacienda nos autorice una transferencia general de fondos para que sean girados a la Policía. Se trata unos 90.000 pesos, pero en este momento de estrechez económica que vive la provincia a veces se hace difícil".

Pérez confió que para su cartera este no es un tema menor "porque se van acortando los tiempos para el inicio del período de formación que después lo vamos a tener que extender para que los futuros agentes puedan acceder a todos los conocimientos".

Dentro de la fuerza reconocen el cursado requiere de una formación mínima de nueve meses de base, un tiempo menor conllevaría que se bajen contenidos, lo que no es recomendable ya que se trata de personas serán servidores públicos que deben ser conscientes de que cada una de las decisiones que toman tienen que estar aparadas por la ley.

"Estamos evaluando la posibilidad, en este contexto, de que los contenidos que se den sean los prioritarios y en cuanto a la prolongación del tiempo se extienda el cursado hasta febrero. Los importante es que salgan con todos los conocimientos básicos que son los importantes", advirtió el ministro, quien confía que en este mes estén los fondos comprometidos.

A la fecha, el ciclo lectivo 2009 que debería haberse iniciado en abril todavía está en veremos por lo que en diciembre no habrá una nueva promoción de agentes de policías.

De los 550 inscriptos sólo 200 aprobaron el examen de conocimientos generales por lo son muchos los jóvenes que aguardan los resultados del preocupacional para tener una nueva oportunidad con los cuadernos, confiaron fuentes policiales.

A esto se suma que la cantidad de aspirantes a ingresar este año es la más baja de la década lo que significa que la Policía debe de repensarse a futuro. Desde la fuerza saben que enero no es un buen mes para las inscripciones y que se debería salir a captar jóvenes a partir de octubre y hasta diciembre que es cuando están definiendo en qué carrera se inscriben. Este sería uno de los cambios que instrumentarían para este año. Por otro lado, lo que más incertidumbre genera puertas adentro de la fuerza es cómo resolver el enigma de que a los jóvenes ya no se los tienta con una obra social y un salario fijo, lo que supo ser un pilar en antiguas convocatorias.