Sábado 30 de Mayo de 2009 Edicion impresa pag. 31 > Policiales y Judiciales
Piden 25 años por el crimen del comisario
Fue la postura de la fiscalía para el presunto autor material. Respecto del cómplice solicitó 20. La querella fue más dura y exigió 33 años de prisión para los dos. La sentencia se conocerá en una semana.

NEUQUÉN (AN).- La fiscalía acusó ayer a Néstor Fabián Zapico de ser el autor material del asesinato del comisario Jorge Chaktoura y pidió que lo condenen a 25 años de prisión por "homicidio en ocasión de robo". Para su presunto cómplice, Sebastián Garro Umanzur, reclamó 20. En cambio la querella entendió que los dos debían ser condenados a 33 años de cárcel.

Para la defensa, en tanto, no hay pruebas y por eso pidió la absolución de ambos imputados, que se declararon inocentes.

La sentencia se conocerá el próximo viernes 5, y marcará el fin de un largo proceso que demandó dos años y medio de investigación y seis largas audiencias orales.

A la jornada de ayer asistieron como oyentes familiares de Zapico y también el comisario mayor Daniel Rojas, quien dirigió la investigación del crimen bajo las órdenes del juez Juan Gago y la fiscal Sandra González Taboada.

El 30 de diciembre de 2006 tres sujetos ingresaron a la casa de Chaktoura, un comisario que tenía esa jerarquía porque era profesor de filosofía en la escuela policial y no porque hubiera hecho carrera en la institución.

Según planteó ayer en su alegato el fiscal Pablo Vignaroli, está probado que Garro Umanzor retuvo a la esposa del comisario mientras su cómplice Zapico le pegó un tiro que le ingresó por el hombro izquierdo, le atravesó corazón, pulmones e hígado, y le causó la muerte inmediata.

Sobre este punto la querellante Alicia Garayo afirmó que cuando recibió el balazo, Chaktoura estaba arrodillado y con las manos atadas con precintos. Además su delicado estado de salud (tenía 63 años, sufría diabetes y estaba convaleciente de una operación) le impedía intentar cualquier defensa.

Vignaroli basó su acusación en el testimonio de la viuda, que reconoció a Zapico por la forma de caminar y a Garro Umanzur por el rostro. También mencionó una huella del principal imputado que fue detectada en el auto de la víctima.

La prueba más polémica contra los imputados es la declaración de un hombre que esa noche llevó a Zapico, Garro y a un menor de edad hasta la casa de Chaktoura y los pasó a buscar minutos después.

Esta suerte de "arrepentido" estuvo en la mira de la justicia pero quedó desligado de las acusaciones cuando delató a los presuntos autores del homicidio. También dijo que Zapico le había confesado que había matado a una persona.

Atento a los cuestionamientos, el fiscal utilizó con cautela la declaración de este hombre; lo mencionó como una prueba más pero sin considerarlo la clave del esclarecimiento.

Al momento de pedir las condenas, el único atenuante que consideró fue la juventud de Garro Umanzur y su falta de antecedentes. En cuanto a Zapico, afirmó Vignaroli que "es cierto que mató a Chaktoura porque era policía" pero no solicitó la aplicación del agravante por la calidad de la víctima.

La querellante Garayo, que representa a la viuda, sí encontró agravantes en una combinación de artículos del Código Penal y pidió 33 años de prisión para los dos imputados.

Use la opción de su browser para imprimir o haga clic aquí