ROCA (AR).- Sin admitir el pedido de prisión perpetua que habían planteado la fiscalía y la querella, la Cámara Criminal Nº 3 de Roca condenó ayer a un joven a la pena de 12 años de prisión, tras encontrarlo autor penalmente responsable del violento asesinato de José Neculpán, de 52 años, ocurrido a fines de marzo de 2008 en el extremo norte de esta ciudad. Luis Alberto Collio se mostró sorprendido al conocer la condena en su contra y dijo que era inocente, ante la mirada de las hijas de la víctima fatal y sus allegados, quienes presenciaron la audiencia.

El fiscal Miguel Fernández Jahde había requerido que Collio sea condenado por el delito de homicidio calificado por alevosía, argumentando que mató a Neculpán aprovechando el estado de absoluta indefensión en el que se encontraba el hombre, tendido en el suelo del zanjón de calle Defensa a causa de los dos "garrotazos" que había recibido en la cabeza durante la pelea con el imputado. La querella, a cargo del abogado Oscar Pineda en representación de las hermanas Neculpán, había agregado la calificación por el móvil de robo, solicitando también la pena de prisión perpetua para Collio.

Sin embargo, por unanimidad los jueces Carlos Vila, Aldo Rolando y Fernando Sánchez Freytes calificaron el hecho como homicidio simple y aplicaron a Collio la pena de 12 años de prisión, considerando como agravantes la naturaleza de la "feroz agresión" y "la magnitud del daño causado", así como sus múltiples antecedentes delictivos. A favor de Collio el tribunal evaluó su "nula educación", las condiciones de "exclusión y marginalidad extrema" en las que creció, su "personalidad antisocial" y el hecho de que se convirtió en alcohólico cuando era apenas un niño.

La defensa de Collio, a cargo del abogado oficial Gastón Martín, había pedido su absolución por el beneficio de la duda, sobre todo basándose en los poco contundentes testimonios reproducidos en el juicio oral y público y en los resultados negativos de la mayoría de las pericias forenses, como los análisis de la sangre en su ropa y las comparaciones odoríficas entre el acusado y el trozo de mampostería de más de 37 kilos con el que ultimó a Collio arrojándoselo sobre la cabeza.

Por sus antecedentes, el joven recibió una tercera declaración de reincidencia. Eso significa que si por cualquier otro delito, aunque sea de los más leves, resulta condenado una vez más, podría sufrir una unificación de penas y una condena accesoria de prisión por tiempo indeterminado, es decir, de por vida.