El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ha movilizado a la Fiscalía en Roma para impedir la publicación de fotografías tomadas en su mansión de Cerdeña, incluidas las de una fiesta a la que asistió la joven de 18 años que supuestamente motivó su ruptura matrimonial.
La Fiscalía ordenó hoy la incautación de cientos de fotografías que, según asegura, fueron tomadas de forma ilegal por el fotógrafo desde una terraza con vistas a la residencia del político multimillonario Villa Certosa, informan hoy medios locales.
El fotógrafo se las ofreció por 1,5 millones de euros (más de dos millones de dólares) a la revista "Panorama", que pertenece al imperio mediático del mandatario italiano, según refleja una copia de la petición de Berlusconi a las autoridades italianas para impedir su publicación.
En ese documento, publicado hoy por el diario "Corriere della Sera", Berlusconi alega que las fotografías muestran acciones "absolutamente íntimas, pero legales, sin relavancia o connotaciones particulares" y que fueron tomadas de forma ilegal con el uso de un equipo fotográfico "potente e intrusivo".
Las fotografías, supuestamente unas 600, incluyen las de una fiesta de año nuevo a la que asistió la aspirante a modelo Letizia Noemi, cuya amistad con Berlusconi ha desatado un escándalo político en Italia. Otras incluyen fotografías de mujeres tomando el sol en "topless" en los jardines de Villa Certosa, de acuerdo con el rotativo.
Además, se cuentan entre las imágenes retratos de una fiesta celebrada por Berlusconi en mayo de 2008 en honor a su invitado, el primer ministro checo, Mirek Topolanek, señala el periódico milanés. La Fiscalía, que ordenó la confiscación de las fotografías, ha abierto una investigación contra su autor, Antonello Zappadu, por violaciones de la privacidad y fraude.
Después de su visita sorpresa a la fiesta del 18 cumpleaños de Letizia Noemi a finales de abril, la enfadada mujer de Berlusconi, Verónica Lario, de 52 años, insinuó a los medios que el primer ministro tenía encuentros "con una menor".
Desde entonces los rumores sobre una posible aventura del mandatario de 72 años lo han puesto contra las cuerdas. El jueves juró "por sus hijos", no haber tenido nunca una aventura con una adolescente.
DPA