NEUQUÉN (AN).- Los empleados públicos afiliados al gremio ATE mantuvieron cerrada la subsecretaría de Salud ayer en una protesta donde expresaron su malestar por la falta de pago del incremento acordado con el gobierno el mes pasado.
La información, confirmada por segundas líneas de la subsecretaría, incluyó la postura del sindicato de iniciar un plan de lucha desde el lunes próximo si la liquidación de los salarios comprometidos no se paga. El personal de las instituciones provinciales, profesional y no profesional, arribó a un acuerdo con el ministro del área, Daniel Vincent, que implica un desembolso adicional para la provincia de 41 millones de pesos anuales. El incremento iba a pagarse luego de 15 de mayo, por planillas complementarias, pero ante la demora, los trabajadores salieron ayer a reclamar la cancelación de los haberes. Y durante parte de la mañana impidieron el ingreso al organismo provincial.
"Si no se normalizan los pagos, el lunes vamos a volver a convocar a las asambleas y seguramente evaluaremos medidas de fuerza", dijo el delegado de ATE, Baltasar Álvarez, que recordó que a principios de año "ya nos quisieron engañar con un acuerdo que finalmente no cumplieron".
Fuentes del gobierno, manifestaron que en principio no habría ningún tipo de obstáculos para que se realicen los pagos. Y deslizaron que uno de los inconvenientes para poner en marcha la liquidación de los pagos, podría ser el paro de la Oficina Provincial de Tecnologías de la Información, OPTIC, la encargada de cargar los salarios en los sistemas informáticos.
Todavía hay una serie de encuentros pendientes de la negociación anterior. Tanto el sindicato como el gobierno volverán a verse las caras, en una convocatoria que todavía no fue oficializada por la subsecretaría de Salud.
Por fuera de este reclamo, ATE viene reclamándole al gobierno un aumento para unos 10.000 empleados que no fueron abarcados por las recomposiciones otorgadas meses atrás.