GUATEMALA (AP).- Miles de guatemaltecos salieron a las calles ayer para exigir que el presidente Álvaro Colom abandone el cargo tras haber sido acusado de ordenar el asesinato de un abogado, mientras que otros miles pidieron que se quede en el puesto.

"¡Fuera, fuera, fuera!´´, coreaban los manifestantes que piden que Colom abandone su cargo mientras se le investiga, agrupados en la plaza frente a la municipalidad de la capital.

A quince cuadras de distancia, los simpatizantes del mandatario gritaban a todo pulmón la consigna de "¡se queda, se queda el presidente se queda!´´.

Ambas protestas concluyeron sin que hubiera incidentes entre uno y otro grupo.

El país atraviesa una de las más graves crisis políticas de su historia reciente luego que el mandatario fuera acusado por un abogado asesinado de ordenar el crimen. Rodrigo Rosenberg dejó un video en el que acusa a Colom, a la primera dama Sandra Torres y al secretario privado de la presidencia Gustavo Alejos de ser los autores del homicidio.

Miles de manifestantes, la mayoría de ellos con prendas blancas, se reunieron en la municipalidad capitalina. Los organizadores decidieron quedarse para evitar choques con la manifestación en favor del mandatario. Al retirarse, los manifestantes llenaron dos kilómetros de una de las principales avenidas del país.

En la Plaza de la Constitución, campesinos y pobladores beneficiados por los programas sociales del gobierno llenaron la plaza central y las calles aledañas para mostrar su apoyo al mandatario porque "está con los pobres".