SAN ANTONIO OESTE (ASA).- Mario Corradini, que desde hace tiempo está dedicado a formar profesionales y promover organizaciones que difundan las aplicaciones de la "biomúsica" en distintos países del mundo (y ahora especialmente en Argentina), posee además de todo, una reconocida trayectoria como músico.
Nacido en Mar del Plata, el artista participó luego junto a figuras de la llamada "trova rosarina" como Juan Carlos Baglietto y Adrián Abonizio del grupo "Irreal".
Luego integró el trío Corradini - Campos junto a su hermano Claudio, con quien plasmó una interesante propuesta experimental de fusión y folklore.
Ya en los ´90, después de grabar la placa "Techos de chapa" con Baglietto como padrino, viajó a Italia, dónde finalmente se radicó y vive actualmente.
En 1998, y atento a su necesidad de seguir experimentando con la música, formó un cuarteto de tango moderno bajo el influjo de Piazzolla denominado "Tangonauta".
Paralelamente, en Italia logró llevar adelante una carrera como investigador y docente que lo llevó a fundar allí su escuela de "biomúsica", una rama de la musicoterapia.
De paso por San Antonio, el músico brindó una serie de charlas y expresó su intención de establecer una escuela similar en la localidad, en respuesta al gran interés que esta disciplina despertó entre los asistentes a las jornadas que llevó adelante.
Corradini trabaja con docentes que fueron formados por él y aplican los conceptos de la biomúsica en nuestro país, México, Chile, EE. UU., Inglaterra y Cuba, y en la actualidad trabaja en comunidades para la rehabilitación de tóxico dependencias, escuelas, grupos e instituciones, tanto con niños como con adultos.