NEUQUÉN (AN).- Desde el gremio de los estacioneros salieron a pedir presencia policial en las estaciones de servicio ya que no coinciden del todo con la instalación de los buzones y peceras blindadas que les propuso el gobierno como solución no policial.

El sistema propuesto consta de la instalación de un buzón empotrado en la playa que haría las veces de caja fuerte, donde el cliente depositaría directamente el dinero durante la carga del combustible. Este buzón será inviolable y sólo los dueños podrán retirar el dinero.

En tanto, en el interior del servicompras se construiría una especie de pecera blindada con una bandeja del mismo material por la cual se realizarían las transacciones. De esta forma el asaltante no podría acceder a la caja registradora ni dañar al empleado que está en su interior.

El valor del sistema, de acuerdo a las cifras entregadas por la Policía a los empresarios y gremialistas supera los 10.000 pesos.

El buzón tiene un costo de 2.900 pesos y su instalación ronda los 2.500, mientras que la pecera con bandeja para el servicompras cuesta 2.500 más 2.900 de instalación.

Daniel Cifuentes, secretario gremial de los estacioneros, entiende que "el sistema no es de prevención ya que esto sólo impide que el asaltante se lleve el dinero, por lo que se va a terminar llevando el reloj, la billetera y el celular del estacionero que va a ser el más expuesto".

Para el sindicalista la solución final a la problemática de los robos es la presencia policial en las estaciones. "La idea es que el delincuente no llegue a la estación", destacó Cifuentes quien recalcó que todo eso será tema de futuros encuentros.

En ese mismo sentido también se expresaron desde la cámara de expendedores quienes han manifestado que por ahora no están en condiciones económicas de asumir el costo de un policía adicional que ronda los 7.000 pesos mensuales, por cubrir solamente el turno noche.

En ese sentido le piden al ministro de Seguridad, Justicia y Trabajo, César Pérez, una rebaja o la cobertura de un porcentaje.