Miércoles 13 de Mayo de 2009 Edicion impresa pag. 34 > Policiales y Judiciales
Otro asalto violento en una estación de servicios de Neuquén

NEUQUÉN (AN).- Un delincuente asaltó ayer a la madrugada el servicompras de la estación de servicio ubicada en San Martín y Solalique, en Neuquén. Maniató a la empleada, le provocó cortes y luego la hizo golpear contra un mueble. El ladrón huyó con $ 2.000 en dinero y tarjetas, y la víctima sufrió tal crisis de nervios que debió ser internada.

Ocurrió pasadas las 5:40 de ayer. El ladrón aprovechó que por un desperfecto técnico el minishopping se había quedado a oscuras por completo y que el playero estaba en su oficina preparando la rendición para entregar al empleado del turno siguiente.

La empleada, de 29 años, fue sorprendida por un sujeto joven que la amenazó con un arma de fuego y le provocó cortes en el brazo izquierdo con elemento "muy filoso". Según informó la Policía, el individuo la maniató con precintos, la llevó hasta la cocina y la empujó. La víctima cayó, golpeó la cabeza contra un mueble y se desvaneció.

Se alzó con dinero en efectivo, tarjetas telefónicas y escapó del lugar. Se desconoce si se movilizaba a pie o en vehículo, y si tenía cómplices. Cuando descubrió el robo, el playero llamó a la policía y a la ambulancia. El personal de la comisaría Tercera encontró a la mujer desmayada y la trasladó al hospital Heller.

Dos personas fueron demoradas por su presunta participación en el hecho. A la tarde, cuando la mujer fue dada de alta y pudo contar los detalles del robo, se determinó que no tenían vinculación y quedaron libres. El caso fue caratulado como robo calificado, a cargo del Juzgado de Instrucción 5 y la Fiscalía de Delitos Violentos contra la Propiedad.

Las expendedoras de combustibles vienen soportando una ola de asaltos a mano armada y reclaman vigilancia policial durante la noche, pero no se ponen de acuerdo con la Jefatura sobre quién se hará cargo del costo. Hace una década, ante una ola similar, el gobierno provincial pagó los adicionales pero la situación ha cambiado y los voceros dicen que ahora no están en condiciones de afrontar el gasto.

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