El papa Benedicto XVI condenó el "repugnante antisemitismo" que persiste "en muchas partes del mundo" y abogó por la paz entre israelíes y palestinos en un discurso pronunciado este lunes a su llegada al aeropuerto Ben Gurión de Tel Aviv.

"Desafortunadamente el antisemitismo continúa alzando su repugnante cabeza en muchas partes del mundo, eso es totalmente inaceptable", afirmó el Papa ante el presidente israelí Shimon Peres y el primer ministro Benjamin Netanyahu. "Se deben concentrar esfuerzos para combatir el antisemistismo en cualquier lugar donde se encuentre", agregó.

El Papa llegó a Israel a las 11H00 (08H00 GMT) procedente de Jordania, para un viaje de cinco días que lo llevará también al territorio palestino de Cisjornadia. Tras la ceremonia de bienvenida debía trasladarse en helicóptero a Jerusalén.

Esta es la etapa más compleja del periplo de Benedicto XVI en Tierra Santa, después de las controversias surgidas por el perdón concedido a un obispo negacionista. El viaje se celebra también después de la controvertida ofensiva militar de Israel en la franja de Gaza, entre el 27 de diciembre y el 18 de enero, que dejó 1.300 muertos palestinos, entre ellos numerosos niños, y fue firmemente condenada por el pontífice.

"La esperanza de numerosos hombres, mujeres y niños por un futuro más seguro y más estable depende del éxito de negociaciones de paz entre israelíes y palestinos", dijo el Papa.

Durante su visita a Israel y Cisjordania, el pontífice alemán, de 82 años, cumplirá una apretada agenda. Aprovechará su visita a Belén para conocer el campo de refugiados de Aida, donde se dirigirá directamente al pueblo palestino, una decisión que incomoda a las autoridades israelíes.

Y será el primer Papa que visite la Cúpula de la Roca en Jerusalén, tercer lugar sagrado para los musulmanes. Antes de partir de Jordania, al término de una visita de cuatro días, Benedicto XVI llamó a la tolerancia religiosa entre cristianos y musulmanes.

"Querría alentar a los jordanos, ya sean cristianos o musulmanes, a basarse en los cimientos firmes de la tolerancia religiosa que permiten a los miembros de diferentes comunidades vivir juntos en la paz y el respeto mutuo", afirmó el Papa antes de partir hacia Tel Aviv.

En 2006 Benedicto XVI había pronunciado un discurso sobre el islam y la violencia en la Universidad alemana de Ratisbona que provocó que desató una ola de violentas protestas en los países musulmanes.

AFP