Dos suboficiales de la Policía Federal retirados, que transportaban dinero de una conocida heladería en la que actuaban como custodias particulares, fueron acribillados a balazos esta mañana cuando bajaron de su camioneta para tomar un café en un puesto de los bosques de Palermo.
El hombre que servía el café, identificado como Paulino Baldeol, de 55 años, que quedó en medio del tiroteo, resultó herido y fue hospitalizado. Según la Policía, se trató de un hecho de "intento de robo común", aunque otras versiones mencionaban la posibilidad de que se hubiera tratado de un supuesto "ajuste de cuentas" por la forma en que se desarrolló el hecho y porque los delincuentes, cuatro en total, no robaron el dinero y escaparon.
Todo se desencadenó a las 8.35 de hoy cuando los suboficiales Juan Carlos Rojo y otro de apellido Navarrete, que iban en una camioneta Peugeot Partner blanca, se apearon del vehículo en los bosques de Palermo, exactamente en la calle Berro entre Sarmiento y Casares, para tomar un café en el puestito.
Los policías, según informó luego el titular del Departamento de Comunicación Social de la Policía Federal, Sebastián Seggio, transportaban en la camioneta el dinero recaudado de la empresa para la que trabajaban, que sería la cadena de heladerías Persico.
Apenas se bajaron de la camioneta, pasó por el lugar un auto Renault Clío, supuestamente de color verde, en el que viajaban cuatro hombres, y descendieron tres de ellos fuertemente armados, incluso con ametralladoras.
Según el comisario Seggio, los desconocidos "se acercaron a los policías, dijeron que era un asalto, los policías se dieron a conocer e intentaron resistirse, y los delincuentes dispararon, provocándole la muerte a los dos", cuyos datos filiatorios no quiso confirmar oficialmente.
Además indicó el comisario que "el señor que atendía el puesto del café" fue alcanzado por disparos de las armas "que portaban los delincuentes, aparentemente ametralladoras, y otras armas cuyos detalles no podemos informar". El cafetero fue trasladado al hospital "Fernández" donde, según el vocero policial, se informó que estaba fuera de peligro.
El jefe policial también dijo que al parecer "alguien quiso socorrer" al cafetero y "pudo haberlo rozado con su auto, y lo llevó al hospital, donde sabemos que se encuentra bien". Seggio dio esa precisión porque en principio había versiones que indicaban que Baldeol, al tratar de escapar del tiroteo, cruzó la calle y fue atropellado por un Fiat Palio.
El comisario afirmó que "aparentemente la intencionalidad del hecho estaba dirigida al contenido de la camioneta, que sería la recaudación de la empresa privada, que no se sabe si se llegaron a robar". Fuentes extraoficiales aseguraron que el dinero no fue retirado de la camioneta.
Seggio insistió en que "no hay ninguna cosa que no sea un robo común, que desgraciadamente le tocó a dos policías". "Intentaron llevarse el dinero, esa fue la intencionalidad, se trata de un hecho de robo", reiteró. Estimó además que "la reacción de los policías y del particular (supuestamenbte el cafetero) que se acercó, impidió el robo".
Agencia DyN
