BUENOS AIRES (ABA) . - Diversos especialistas están advirtiendo que la política de autofinanciamiento y el rol diferenciado que está comenzando a cumplir la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) podría generar en el mediano plazo un grave desfinanciamiento en el sistema previsional, lo cual derivaría en un fuerte ajuste fiscal.
En tal sentido, la economista y consultora María Castiglioni advirtió que "el problema es que no hay trasparencia en las cuentas del sistema previsional, y eso se evidencia sobre todo en que se está usando la plata de los futuros jubilados". Ya que en los últimos meses, la Anses, contando con el ingreso extraordinario de los fondos de las ex AFJP, ha comenzando a otorgar líneas de crédito para industria y consumo, un aspecto discutible en cuanto al rol que debe desempeñar esa administración.
Los especialistas coinciden en que en ese caso la Anses debería transformarse en un banco como ocurre en otros países, sin ir más lejos en Uruguay, donde existe el Banco de Previsión Social.
"No creo que en la Argentina en este momento se lleve adelante una idea de transformar la Anses en un banco, porque en ese caso las normas son sumamente estrictas con los balances y con toda la información pública", apuntó Castiglioni.
Tanto la especialista como el ex secretario de Ingresos Públicos, Raúl Cuello, resaltaron que la Anses está comenzando a tener una gran cantidad de títulos públicos, ilíquidos, de baja calidad, que no se aceptan en el mercado, comprometiendo así las posibilidades de recursos para los futuros jubilados.
Es más, son varios los especialistas que a esta altura de los acontecimientos rescatan una característica de las AFJP ya que consideran que las administradoras tenían un esquema de inversión más estudiado, con análisis técnico mucho más profundo.
Justamente, en el Ministerio de Economía advirtieron en este último mes la necesidad de dotar a las Anses de títulos públicos más líquidos, con mejor calidad.
Por si fuera poco, en las últimas horas se conoció que con los fondos de los jubilados se financiará una papelera (Massuh) que está en concurso y que la misma será manejada por el polémico secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno. Es el "debut" de la Anses en la función de administrar una empresa ya que hasta ahora se había limitado (como herencia de las AFJP) a tener una participación minoritaria en acciones de compañìas.
Es por ello que se considera inminente el lanzamiento de un nuevo bono denominado Bonar XVI, cuyo vencimiento se concretará en el año 2016.
La información fue confirmada por una importante fuente del Ministerio de Economía, quien aclaró que con esta operación el Poder Ejecutivo busca financiar las arcas públicas con fondos de la Anses por un monto de 9.000 millones de pesos.
Según comentó el funcionario, el mecanismo para llevar adelante esta iniciativa se realizará mediante un canje de Letras de Tesorería del Estado, que está en poder del organismo previsional, por ese nuevo título denominado Bonar XVI.
El bono que posterga la deuda que el gobierno tiene con la Anses pagará como rendimiento la tasa Badlar, más 3,5 puntos porcentuales de spread, según fuentes de Economía.
Paralelamente, diversos analistas han advertido en los últimos días el creciente endeudamiento de Tesorería con los organismos del Estado, que la política de autofinanciamiento tiene un techo, y que resultará muy difícil continuar con la actual estrategia. Según coinciden los analistas, el monto de esa deuda se ubica entre 140 a 150 mil millones de pesos
"La Argentina no puede acceder a los mercados internacionales, primero porque continúa en default con el Club de París y con los acreedores que no ingresaron al canje de 2005; y segundo, porque hay más desconfianza en las cifras del país´´, concluyó Raúl Cuello.
