Luego de las acaloradas críticas de la presidente Cristina Kirchner a una entrevista periodística en la que el titular de la Sociedad Rural Argentina, Hugo Biolcati, y el periodista Mariano Grondona hacen referencia a un posible cambio de manos anticipado del Poder Ejecutivo, en caso de que el oficialismo pierda las elecciones, el vicepresidente, Julio Cobos, reapareció en escena y pidió respetar la institucionalidad.

"Desde las instituciones hay que acompañar a la Presidente hasta el último día de gestión y hay que hacer todo lo que sea necesario para que culmine su mandato", expresó el vicepresidente, quien había sido citado en los comentarios televisivos como una alternativa posible ante la eventualidad de un retiro presidencial.

Enseguida, Cobos aclaró en un tono desacostumbrado, para advertir a quien pidió la opinión: "No me parece adecuado hacer preguntas que generan dudas sobre la continuidad del mandato de la señora presidente".

Estas declaraciones se produjeron el jueves pasado luego de un acto de presentación del libro "El Poder Legislativo", un trabajo de compilación de Jorge Horacio Gentile, que se realizó en el Salón Azul del parlamento nacional.

Entre tanto, Francisco de Narváez, postulante a la reelección por Unión PRO, ironizó con que "el problema de la Presidenta no es la gobernabilidad, sino su marido que es el ´señor problema´" y expresó: "Ojalá que después de la derrota Néstor Kirchner se vuelva a El Calafate".

Tras sostener que "Kirchner ya perdió la elección", De Narváez manifestó: "Me preocupa que la señora Presidenta se suba al discurso de su marido para meterle miedo a la gente. Ella tiene una responsabilidad institucional, no puede asustar a los argentinos". A su vez, Ricardo Alfonsín, candidato a diputado por el Acuerdo Cívico y Social Ricardo Alfonsín manifestó que el 28 de junio "no está en juego la estabilidad, sino la calidad de la democracia". (DyN)