El holandés que este jueves mató con su automóvil a seis personas durante un desfile de la familia real no tenía alcohol en la sangre, según los resultados de la autopsia dados a conocer hoy por el gobierno.
Karsten T., un desempleado de 38 años, dejó también 12 heridos al sortear diversos controles y aplastar a varios espectadores que presenciaban el paso de la reina Beatriz en la localidad de Apeldoorn.
El atacante quedó gravemente herido después de estrellar su coche contra un monumento, y llegó a aceptar que su intención había sido atentar contra la familia real.
Horas después murió por las heridas recibidas en la cabeza, según la autopsia. Los forenses detectaron rastros de hashís en el cadáver, aunque llevaban varias semanas en el cuerpo.
Agencia DPA