NEUQUÉN (AN).- "Fuimos de vacaciones y un poco por trabajo y al final andábamos con barbijos en el auto y nos lavábamos las manos a cada instante". Así sintentizó Nicolás Gadano, un economista bonaerense, el viaje que junto a su esposa e hija realizó a México.

Gadano regresó al país el martes , en el anteúltimo vuelo que pudo ingresar a Ezeiza.

"Llegamos a México el jueves de la semana pasada. Mi mujer iba a trabajar y mi hija de 7 años y yo íbamos a recorrer la ciudad, pero el viernes a la mañana nos encontramos con la explosión del tema", explicó Gadano y agregó que "el domingo fue el día más terrible. El gobierno anunció que cerrarían los comercios y hubo gente que salió a comprar comida y medicamentos, pero en forma ordenada, porque la verdad es que es un pueblo muy respetuoso de su gobierno". Si bien aseguró que "la gente estaba tan tranquila que no tuvimos miedo, pero sí me preocupaba contraer cualquier enfermedad y que no nos dejen subir al avión o tener que ir a un hospital, porque ahí (sí) me iba a contagiar la gripe porcina".

Gadano explicó que una vez en el país, "desviaron el avión a un sector especial, nos hicieron un cuestionario médico, firmar una declaración jurada y pasar por un escáner térmico.