CIPOLLETTI (AC).- Alex Hernán Velázquez Barrientos seguirá detenido. La Cámara Primera del Crimen de Cipolletti resolvió ayer confirmar la prisión preventiva al sospechoso del asesinato de la joven de Fernández Oro, Agostina Mazzina, ocurrido el 31 de enero pasado.

Mientras, se espera que la junta médica dictamine cuál es su estado de salud mental para ver si puede ser considerado imputable o no. Trascendió que los profesionales en forma individual terminaron sus informes pero aún la junta no elaboró un dictamen conjunto porque el forense Marcelo Uzal, que preside el grupo de profesionales, está de licencia. Recién después del 18 de mayo se conocerá la conclusión.

El plantel que analiza la situación mental del acusado está integrado por un médico forense, dos psicólogos forenses y dos psiquiatras.

Por lo pronto, la Cámara decidió ayer "declarar desierto el recurso de apelación" interpuesto contra el procesamiento de Velázquez Barrientos y "confirmar la prisión preventiva" del sospechoso, "por ser evidente que intentará eludir la acción de la justicia".

El defensor oficial Alejandro Silva había apelado el procesamiento que le dictó el juez Gustavo Herrera por el delito de "homicidio agravado por haberse cometido con ensañamiento y alevosía", y pedía la excarcelación. Silva pretende demostrar que el sospechoso es inimputable.

Los jueces Jorge Bosch, Alvaro Meynet y Daniel Drake, respecto de la prisión preventiva, se basaron en que el Superior Tribunal de Justicia, en el fallo "Hernández", estableció que "lo que había que ponderar eran las posibilidades de impedir el desarrollo eficiente de las investigaciones y la no elusión de la justicia".

"Es claro que cualquier mortal frente a tan grave reproche buscará por todos los medios evitar enfrentar tan posible drástico resultado, como lo es una prisión perpetua. Ello es inexorable y va de la mano de la sobrevivencia humana", plantearon los camaristas.