Jueves 30 de Abril de 2009 Edicion impresa pag. 26 > Debates
La mafia italiana se ríe de la crisis
A diferencia de los bancos, el hampa no tiene problemas de liquidez: sus clientes siempre pagan. Por eso aprovecha las "gangas" y compra, aumentando su poderío económico.

NÁPOLES.- Mientras las grandes empresas de todo el mundo buscan maneras de sobrevivir, la mafia italiana vive una era dorada. Las varias organizaciones criminales italianas -a menudo agrupadas coloquialmente como "Mafia Inc."- están adquiriendo estaciones de gasolina y franquicias de supermercados, haciendo préstamos a negocios y comprando restaurantes y edificios en elegantes barrios en Roma y Milán, dicen investigadores.

Esos mafiosos tienen lo que les falta a muchos empresarios en estos días -liquidez-, además de una gran experiencia en aprovecharse de los vulnerables, cuyas filas han aumentado en esta crisis económica global.

Todo eso significa que el hampa está en condiciones de invertir dinero en dos áreas que están en el corazón del desplome financiero: los mercados de crédito y bienes raíces.

Los sindicatos del crimen nadan en miles de millones de euros generados por extorsión, tráfico de drogas y la venta de copias falsas de ropa de alta costura, producidas en China expresamente para la mafia italiana, un sector cada vez más lucrativo en momentos en que los consumidores buscan baratijas, dicen fiscales y la policía.

Para los capos mafiosos italianos, el desplome financiero mundial es "simplemente una oportunidad", dijo el fiscal antimafia Franco Roberti en su oficina en Nápoles, la caótica ciudad portuaria que es la sede de la Camorra, uno de los mayores sindicatos del crimen en Italia.

Italia ha conseguido éxitos espectaculares en la lucha de decenios contra la mafia, capturando a altos jefes, convenciendo a miembros renegados de que declaren en las cortes y alentando a ciudadanos comunes a resistirse a extorsiones. Pero el hampa sigue creciendo, y sus esfuerzos en años recientes para adquirir porciones en negocios legítimos están dando grandes resultados en la actual crisis. En Roma, en los lujosos barrios alrededor de la Plaza de España, la Plaza Navonna y la Fuente de Trevi, los mafiosos están adquiriendo inmuebles, dijo el fiscal Giancarlo Capaldo. En pesquisas de lo que Capaldo describió como "indicios" de que los hampones han comprado hoteles, restaurantes y cafés en Roma, la policía confiscó bienes de algunos de esos negocios, aunque los establecimientos continúan abiertos. "Estos lugares son bien administrados porque ellos quieren ganar dinero", dijo Capaldo, que declinó identificar los establecimientos porque la investigación está en curso, limitándose a decir que "usted encontrará algunos en las guías de turismo".

La oficina de Capaldo confiscó también concesionarias de automóviles en Roma de manos de presuntos camorristas o sus aliados. "La Camorra se gana el dinero aquí en el sur pero lo invierte en actividades legales en el norte", dijo el general de la policía de aduana e impuestos Giovanni Mainolfi en Nápoles.

Si los mafiosos construyesen palacios en el sur "llamarían la atención, pero si lo hacen en Milán no se nota", dijo Mainolfi. En una operación llamada "Dinero Fácil" la policía confiscó este año un hotel en el exclusivo balneario toscano de Punta Ala, un supermercado, dos Ferraris, una estación de gasolina en la región norteña de Reggio Emilia y otras propiedades por un total de 30 millones de euros. Se cree que esos negocios eran propiedad de la Camorra y alimentados por las ganancias del narcotráfico.

Los ingresos conseguidos por los sindicatos italianos del crimen serían más que respetables para muchas compañías listadas en las bolsas de valores en estos días aunque, por supuesto, los hampones no emiten reportes anuales. El centro de estudios Eurispes, con sede en Roma, estimó que en el 2008 "Mafia Inc." ganó 130.000 millones de euros (167.000 millones de dólares) -un 8% del producto bruto interno de Italia-, casi la mitad de ello por el narcotráfico.

Eurispes, que analiza tendencias sociales, económicas y delictivas, dijo que los préstamos ilegales generaron unos 12.600 millones de euros de esos ingresos. El centro calculó que unos 180.000 negocios obtuvieron sus préstamos, directa o indirectamente, a través del crimen organizado en Italia.

La crisis financiera ha tenido gran impacto en Italia en los primeros meses del año y por ahora es demasiado pronto para determinar cuántas ganancias adicionales pudo haber conseguido el crimen organizado. Pesquisas gubernamentales han determinado que a medida que lavan sus ingresos ilegítimos los capos mafiosos transfieren su dinero del empobrecido sur del país, donde están basados, y lo trasladan al centro y el norte de Italia.

 

El regreso de la usura

 

En marzo los servicios italianos de inteligencia advirtieron que el creciente desempleo y la caída del crédito podrían ayudar a los sindicatos criminales a extender sus tentáculos alrededor de amplias secciones del sector empresarial del país, incluyendo supermercados, bienes raíces y turismo. Un motor central del creciente fortalecimiento del hampa -la vieja práctica de usura- está en auge, en momentos en que los bancos se aferran al efectivo, lo que permite a la mafia presionar a empresarios legítimos.

Los mafiosos se aprestan a "adquirir el control de negocios en dificultades, especialmente por medio de su práctica de usura", además de "comprar bienes colocados en el mercado por empresas que sufren crisis de liquidez", dice el reporte de inteligencia. Las nefastas predicciones parecen nacidas de quejas de empresarios. SOS Impresa, un lobby empresarial italiano dedicado a combatir el crimen organizado, estimó en un informe a finales del año pasado que la Camorra ha "multiplicado por 10, 100, quizá 1.000 veces su penetración en el tejido social, aumentando su presencia en las empresas de nuestro país, en Europa y en el mundo".

 

Más rentable que la droga

 

En Roma, la Camorra ofrece a negocios en apuros atractivas tasas de interés, calculando que los mismos terminarán como parte de su imperio económico si el dueño se retrasa en los pagos, dijo el fiscal Roberti. Los mafiosos a menudo dejan al dueño original como fachada, para evitar sospechas, dice la policía.

El reporte de los servicios de inteligencia predice que la mafia aumentará la producción de falsificaciones de bienes de marcas de lujo, dada la mayor demanda en tiempos de crisis. Eurispes estimó que ese creciente negocio generó para la mafia unos 6.300 millones de euros el año pasado. Roberti dice que la Camorra ha desarrollado lo que una vez fue un sector menor, con los clanes mafiosos estrechando lazos con pandilleros en China, donde los artículos falsos son producidos en masa. El tráfico de esos bienes falsificados se está convirtiendo ahora en más rentable para la Camorra que traficar cocaína y hachís, dijo Minolfi. Por cada euro que cuesta producir los bienes falsificados, la Camorra gana 10, mientras que por cada euro empleado en el narcotráfico gana entre seis y siete. (AP)

Por FRANCES D´EMILIO

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