Una condena por "homicidio simple en concurso ideal con aborto" dictó ayer, por unanimidad, la Cámara Criminal Nº 1 de Roca contra César Offidani. El imputado, de 28 años, fue declarado responsable del crimen de su novia, Daiana García, y de la consiguiente muerte del bebé de 28 semanas de gestación que llevaba la chica en su vientre.

Con 13 años de prisión condenó el tribunal al inalterable joven, quien no mostró un solo gesto de desánimo o alteración al momento de escuchar la parte resolutiva del fallo ni las duras apreciaciones sobre su conducta que leyó el camarista Carlos Gauna Kroeger.

La víctima tenía tan sólo 14 años y el bebé que esperaba era fruto de su relación anterior con otro joven, de nombre Juan. Los hechos que derivaron en el crimen, según la sentencia y la propia declaración indagatoria de Offidani, se desencadenaron cuando en la madrugada del 17 de enero de 2008 la menor de edad amenazó al acusado con abandonarlo y regresar con su anterior pareja, quien además era el padre de su hijo por nacer. Todo aconteció en una pequeña piecita que ambos alquilaban en calle Piedrabuena 1553 de Roca, tan sólo un día después de que Daiana García confirmara a través de una ecografía que sería madre de un varón.

La afirmación de que ya no estaría en la casa cuando él regresara de trabajar despertó la inesperada reacción de Offidani: "Me agarró desesperación y la agarré de la garganta y le tapé la boca? no me acuerdo por cuánto tiempo. Después no me acuerdo más nada, hasta que un policía me sacó del canal grande", citó el juez en la sentencia, en un extracto de la primera declaración indagatoria del imputado.

El comportamiento del muchacho después del desvanecimiento de la víctima fue evaluado duramente por el juez Gauna Kroeger en su voto. Sobre todo, cuestionó que haya tratado a la jovencita como "un trofeo de guerra en su controversia con Juan", al escribir sobre su cuerpo ya sin vida dos frases dirigidas al ex novio de Daiana: "Te gané Juan, me la llevé yo. César" y "César y Daiana se aman por siempre".

También lo culpó de "simular" un intento de suicidio arrojándose a las aguas del canal principal de riego del barrio J. J. Gómez de Roca, dejando previamente una nota manuscrita dentro de su auto, anunciando su determinación. "Esperó a que pasara un patrullero para tirarse al agua. Si hubiera querido quitarse la vida lo hubiera hecho antes", analizó, acusándolo además de intentar "preconstituir prueba" a su favor con esa actitud.

El abogado defensor de Offidani, Eves Tejeda, no estuvo presente en la lectura del fallo. Llamativamente tampoco acudieron los familiares de la víctima. Sólo la madre y otros allegados del joven condenado presenciaron la audiencia y en las puertas de Tribunales no quisieron hacer declaraciones. "No es momento... Sólo voy a decir que mi hijo no la mató", afirmó la mujer.

En su alegato, la fiscal Ana Benito había pedido una condena de 20 años por considerar que se trató de un "doble homicidio". La defensa, por el contrario, había pedido la absolución y subsidiariamente la pena mínima por el delito de "homicidio preterintencional", pero ambas opciones fueron descartadas por los jueces Carlos Gauna Kroeger, Mario Bufi y el subrogante Emilio Stadler.