Una mujer de 63 años fue víctima de un robo por encargo en el cual le llevaron 7.000 pesos, alhajas, tarjetas de crédito y cheques en blanco. No le hicieron daño. La policía sigue distintas líneas de investigación pero todavía no se produjeron detenciones.
El robo se produjo anoche alrededor de las 21.45. Mirta Susana Fernández volvía de su negocio, del que no trascendieron datos, a su casa ubicada en el monoblock B-3 del barrio de las 252 vivienda cuando fue abordada por dos sujetos.
Uno de los delincuentes la amenazó exhibiéndole un revolver y el otro le tapó la boca y la obligó a abrir la puerta del duplex.
Una vez adentro la quisieron amaniatar con el cable de un cargador de celular pero ante la resistencia de la señora, uno de los sujetos le explicó que estaban ahí por encargado, que buscaban unos papeles y que su intención no era hacerle daño. Posteriormente la encerraron en el baño mientras revolvían la casa.
Los delincuentes se alzaron con 7.000 pesos en efectivo, todo en billetes de 100 pesos, alhajas varias, tres cheques en blanco y una tarjeta de crédito. Con el botín en sus manos se dieron a la fuga, aparentemente, a pie.
La mujer dio aviso al comando radioeléctrico que de inmediato envió un móvil de la comisaría tercera al lugar y si bien se desarrolló un rápido operativo de rastrillaje en la zona no se pudo dar con los asaltantes que continúan prófugos.
Los pesquisas que investigan la causa estiman que a la victima le hicieron todo un trabajo de inteligencia y que el encargo podría venir de su círculo íntimo, parientes y amistades. De todas formas consideran que el anuncio del encargo podría tratarse también de un ardid de los asaltantes para despistar.
La causa está caratulada como robo calificado a cargo del Juzgado de Instrucción Nº 4 y la Fiscalía de atentados violentos contra la propiedad.
Redacción on line
